La final de los errores
Xala y Eulate logran el campeonato de Parejas tras vencer en un mal partido a Olaizola I y Beloki
Nadie quería la txapela. O, al menos, así lo parecía. En un partido irregular, marcado por los altibajos de los jugadores, a excepción de Martínez de Eulate, y por los errores, las victimas a priori se hicieron con el campeonato. Xala y Martínez de Irujo conquistaron el título después de un choque trabajoso y molesto, con demasiado temor por ambas partes. Lo hicieron, además, tras dar la vuelta a un partido que habían comenzado dominando.
Beloki y Olaizola I estuvieron a punto de rozar el desastre. El de Goizueta salió descentrado, regalando pelotas muy fáciles. Del 3-3 se pasó al 3-9 después de que Xala rematase tras un corte de Olaizola. El francés, en estos compases iniciales, resultó el dominador. Un par de buenos remates y los errores de Olaizola y Beloki fueron suficientes para crear esta ventaja. La parroquia, nerviosa después de que el dinero saliese colorado, trató de cubrirse las espaldas. Los errores se sucedían entre los zagueros. El tanteador pasó del 3-9 al 6-11, con Xala muy activo y valiente, llevando una pelota casi al rebote que Beloki no pudo sujetar. Sin embargo, el delantero francés se descentró tras fallar un gancho que se le fue a las tablas y una pelota franca en el cuatro que no llevó a buena que puso el 9-11.
Martínez de Eulate, con dos campeonatos consecutivos, se consolida como un zaguero sólido
Olaizola comenzó a carburar al mismo tiempo que Xala se apagaba. El choque cambió de color gracias al delantero de Goizueta, quien intentó remates, golpeó con fuerza la pelota e hizo sudar a Martínez de Eulate, que, sin demasiado golpe, sí que hizo una exhibición de inteligencia a la hora de buscar pared izquierda e incomodar a sus rivales. Los fallos de unos y otros se tradujeron en un intercambio de tantos. Hubo empates a 11, 12 y 13. Eulate, en ese momento, no consiguió llevar la pelota desde el siete y los colorados se pusieron por delante por segunda vez en el partido, tras lograr el tanto inicial.
Si Olaizola había pasado desapercibido en el primer tramo, fue Xala el que se borró durante media docena de tantos. La pelota pasaba sobre el delantero sin que éste hiciese ademán alguno de cortarla y ayudar a su compañero, quien sufrió un auténtico bombardeo, aunque Beloki firmó ayer el encuentro más flojo de todo el campeonato, sin que su diestra llegase a mandar con potencia. Eulate trataba de capear el temporal, pero Olaizola se exhibió con un soberbio sotamano, ingobernable para Eulate y una dejadita al txoko tras un genial dos paredes a los que se sumaron un error del propio zaguero navarro y otro de Xala. Con el 16-13 a favor de Olaizola y Beloki volvieron los nervios a la grada. Todo parecía decantado a favor de los colorados, pero faltaba la traca final. Un error de Beloki supuso el 14 para los azules y una buena pelota de Olaizola al cuatro, cuando Eulate estaba demasiado atrás, el 17-14.
A partir de aquí, ni Beloki ni Olaizola supieron ir a por la victoria. El de Burlada erró un par de pelotas francas y Xala despertó tras media hora de abandono con un duro golpe atrás que concluyó con una dejada.
Olaizola volvió a ser el nervioso delantero que veía, como al inicio, que le ganaban por la mano. Se le cayeron dos pelotas seguidas (17-19) y Xala llevó un machetazo a la pared izquierda, aunque erró para que los colorados llegasen a 18 cuando se le enganchó una pelota clarísima en el tercer cuadro. Sólo faltaban dos errores más, uno por cada miembro de la pareja roja, para que Eulate y Xala se alzasen con la txapela por 18-22 en un partido para olvidar, pero que consagra a Martínez de Eulate, con dos campeonatos consecutivos, como un zaguero sólido y de garantías cara al futuro.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.