Dos automovilistas pierden todos sus puntos en la ronda de la muralla de Lugo

Dos conductores de Lugo, uno de ellos novel, perdieron la totalidad de los puntos en la madrugada del pasado domingo, día 18, cuando fueron sorprendidos por la policía local circulando de forma temeraria por la ronda de la muralla de la capital lucense. Además, uno de ellos dio positivo en la prueba de alcoholemia tras sufrir un accidente, y el otro se saltó un control de velocidad para darse a la fuga cuando fue sorprendido circulando casi al doble del límite permitido.

La ronda de la muralla se ha convertido en uno de los puntos de mayor conflictividad viaria en el casco urbano de Lugo. La velocidad está limitada a 50 kilómetros por hora, pero, sobre todo de madrugada y en fines de semana, se superan con frecuencia esos límites. En los últimos dos años, tres personas perdieron la vida en otros tantos atropellos, y se registró, cuando menos, un accidente con dos heridos graves.

El domingo, sobre las tres de la mañana se produjo el primer accidente, cuando un vehículo se salió de la calzada, saltó el bordillo que delimita la zona verde del monumento e impactó contra un cubo de la muralla. En su interior se encontraba J. C. F. A., un conductor de 19 años que arrojó una tasa de 0,45 miligramos de alcohol, el triple de lo permitido para un novel. Además, también fue denunciado por una presunta conducción temeraria. Casi una hora más tarde, otro conductor también recibió sanciones que, de consolidarse, le supondrán la pérdida de la totalidad de los doce puntos. Se trata de A. V. L., de 24 años, que guiaba un turismo cuando fue sorprendido circulando a 98 kilómetros por hora.

Pero más sorprendente que la velocidad fue su comportamiento. Hizo caso omiso a las indicaciones que le realizaron los agentes de la Policía Local para que detuviera su marcha y optó por escapar. Lo hizo zigzagueando para esquivar a los policías, aunque su fuga duró poco. Instantes más tarde, y no muy lejos del lugar en el que optó por continuar con su desenfrenada carrera, fue alcanzado por otra patrulla que consiguió interceptarlo.

Una joven de 22 años, Sandrine G. P., vecina de O Carballiño, falleció ayer, por otra parte, en un accidente de tráfico cuando el coche que conducía, un Renault Clío, se salió de la calzada y se empotró contra un poste de hormigón, según informa Cristina Huete. La muerte se produjo en el instante, ya que el lateral izquierdo del vehículo recibió todo el impacto. El accidente tuvo lugar hacia las 9,45 horas de la mañana en el kilómetro 33,3 de la N-541, en el municipio de Boborás. Dada la proximidad del lugar del siniestro con el domicilio de la joven, la primera persona que se percató del accidente fue un familiar que avisó a los abuelos con los que vivía la conductora, quienes se personaron inmediatamente, antes de ser evacuado el cadáver.