"El transporte público requiere inteligencia, dinero y una política de restricción del coche"

Manuel Villalante es el nuevo director general de Transportes Terrestres. Procede de Ferrocarrils de la Generalitat, donde ha sido director, y antes estuvo en Transportes Metropolitanos de Barcelona. Es profesor de Movilidad en la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC).

Pregunta. Renfe no es suya, pero ¿le preocupan las averías?

Respuesta. Me preocupa en la medida en que afectan a Cataluña, al margen de quién sea el titular del servicio. Lo que ocurre en Renfe es fruto de un periodo en el que no se han producido las inversiones necesarias en renovación y modernización, y también de las obras del AVE. Todo hace pensar que faltan unos meses hasta que el plan de choque del ministerio se note. Pero preocupa también que, más a medio plazo, esto genere una cierta desconfianza hacia el transporte público.

"El año 2010 es la fecha en que se tienen que liberalizar los ferrocarriles"

P. Estos problemas aumentan el colapso en los accesos a Barcelona porque el sistema de superficie no funciona.

R. Tenemos que tomarnos tan en serio los autobuses como el transporte ferroviario, porque son dos cosas que van íntimamente ligadas. El futuro de los desplazamientos pasa por la intermodalidad. No todo el transporte público tiene que ser ferroviario. Pero sí que todo el transporte público tiene que ser debidamente coordinado.

P. Los sindicatos y la patronal dicen que las últimas averías de Renfe afectan ya su capacidad productiva.

R. Sí, porque muchas de ellas se han producido en hora punta y en itinerarios donde la movilidad obligada, cotidiana, laboral o como se le quiera llamar es claramente prioritaria.

P. ¿Tiene proyecto global el Gobierno de la Generalitat?

R. Tenemos las directrices de movilidad, el plan de infraestructuras del transporte que se aprobó el pasado verano. Ahora estamos trabajando en el plan de servicios de carretera. Lo que entendemos que falta es un plan de cercanías.

P. ¿Basta con eso para que funcione el transporte público?

R. Tienen que darse tres cosas: inteligencia, dinero y una política de restricción del coche. Porque hay un momento determinado en que, aunque tuviéramos las mejores líneas de tren y los mejores autobuses del mundo, si no tenemos una política clara de movilidad, de restringir el uso del coche, nada funcionaría.

P. La única restricción que hay en estos momentos es el peaje en destino; es decir, pagar por aparcar.

R. Sí, pero puede haber muchas más. Si uno mira los municipios de Cataluña de hace 20 años, las calles que había para peatones y los de ahora, no sólo en Barcelona, sino en toda Cataluña, la diferencia es abismal.

P. Usted decía que aún no hay plan de cercanías, ¿la Generalitat tiene capacidad de incidencia sobre este plan?

R. A ver, no está hecho, pero hay un compromiso. Las leyes están para cumplirlas y si lo dice el Estatuto... pero el objetivo final es dar al ciudadano un servicio mejor que el que tiene ahora, más fiable, con mayor cobertura. Para esto se necesita recuperar el tiempo perdido con inversiones y a partir de aquí regularlo. Hay un acuerdo hasta 2010, cuando entre en vigor la liberalización ferroviaria.

P. En 2010 la gestión tendría que ser de la Generalitat.

R. El año 2010 es la fecha en la que se produce la liberalización ferroviaria. Luego se analizará qué se hará, quién gestiona las vías y quién opera los trenes. Otra cosa es la capacidad normativa. Se tendrá que llegar a un acuerdo. Hay infraestructuras como la del Maresme en las que todo el servicio es de Cercanías. En las demás tiene que haber un ente regulador entre la Generalitat y el Estado que ajuste los huecos entre las líneas de larga distancia y las Cercanías; por tanto, se requiere una negociación.

P. ¿Respecto al metro?

R. Tenemos, aparte de la línea 9, las obras de la línea 3 entre Canyelles y Trinitat Nova. Terminarán a finales de este año, el próximo ya empezarán las obras de instalaciones y en septiembre de 2008 podría estar en funcionamiento. La línea 5 entre Horta y Vall d'Hebron y el Carmel se ha iniciado estos días. La idea es que antes de 2009 se tenga terminada la infraestructura. Lo que intentamos es solapar una fase con otra, el acondicionamiento con la construcción. En verano de 2009 tendríamos también la prolongación entre Pep Ventura y Badalona de la línea 2 y luego el tramo de Sant Antoni y Fira 2 y conexión con línea 9.

P. ¿Ésta en 2015?

R. Para la línea 9 no me atrevo a dar fecha. Se está estudiando todo el trazado.

P. ¿Era malo el proyecto?

R. Los proyectos no estaban a la altura necesaria para una inversión de este tipo.

P. ¿Esto no genera responsabilidades políticas?

R. Yo no quiero juzgar cómo se hizo. Lo que sí puedo decir es que se ha optado por hacer un análisis mucho más riguroso.