El aeropuerto de Reus prevé triplicar sus vuelos en cinco años con la futura terminal
De 1,3 millones de viajeros anuales registrados el año pasado a cuatro millones que se esperan para 2012. Éste es el salto que AENA, el ente público que gestiona los aeropuertos y la navegación aérea, prevé para el aeropuerto de Reus cuando esté lista la nueva terminal, que ayer sacó a concurso y que deberá sustituir a las dos terminales actuales, una de llegadas y otra de salidas.
El futuro que AENA dibuja para el aeropuerto reusense en lo que a tráfico se refiere lo equipara al actual aeropuerto de Bilbao, por el que el año pasado circularon 3,8 millones de viajeros, o al de Girona, que durante 2006 registró un tráfico de 3,6 millones de viajeros.
Un edificio de 58.000 metros cuadrados, de dos plantas, con 36 mostradores de facturación y 8 cintas tansportadoras para recoger equipaje es el resumen de una obra cuyo coste rondará los 100 millones de euros y que no estará lista antes de 2010. De momento, AENA se gastará 3,8 millones en la redacción del proyecto y ayer comenzó la demolición de la antigua base militar, que ocupa unos terrenos colindantes con la futura terminal.
Este futuro edificio, con capacidad para 2.900 pasajeros por hora, sustituirá a la terminal de llegadas -inaugurada en agosto de 2005- y al edificio de salidas, ahora en reformas para adaptarse al crecimiento de viajeros que registra el aeropuerto.