Barberá promete al Levante UD el mismo trato que al Valencia CF para otro estadio

El proyecto de un nuevo estadio para el Levante UD se abre paso cuando aún no está definitivamente aprobada la doble operación urbanística de Mestalla, que permitirá al Valencia CF vender su suelo para levantar viviendas y comercios en el suelo del viejo campo y construir el nuevo en la avenida de las Cortes Valencianas, con un beneficio mínimo de 100 millones de euros.

El Levante UD también aspira a cerrar una buena operación urbanística. La alcaldesa, Rita Barberá, del PP, le ha prometido "el mismo tratamiento" que al rival futbolístico. Barberá se entrevistó ayer con el presidente granota, Julio Romero, y el máximo accionista del club, Pedro Villarroel, para que le explicaran el proyecto del nuevo estadio que sustituiría al Ciutat de València en Orriols, y dijo que le encantaría ser "la alcaldesa que devuelve el estadio del Levante a los barrios marítimos", donde nació el club.

Barberá escuchó a los representantes levantinistas "con todo el afecto, cariño, compresión y voluntad" cuando le expusieron la voluntad de construir un nuevo estadio con capacidad para 25.000 a 30.000 espectadores. La alcaldesa se mostró cauta sobre las posibilidades del proyecto porque "la dificultad es la carencia de suelo en la ciudad". El Ayuntamiento tramita la revisión del plan general urbano, donde sí está previsto que se compense con suelo comprado por el Valencia CF la pérdido de terreno dotacional en la avenida de Cortes Valencianas, solar deportivo que pasa a manos privadas.

El problema es que "ahora no existe esa parcela pública de alrededor de 30.000 metros cuadrados", indicó la alcaldesa, que añadió que "habrá que localizarla, y aunque dependerá de muchas cosas".

Mismo arquitecto

En la reunión también estuvieron presentes el teniente de alcalde, Alfonso Grau, y el concejal de Urbanismo, Jorge Bellver, valedores del plan del Valencia CF, y el arquitecto Alejandro Escribano, que ya ha redactado la propuesta de Juan Soler. "Se ha acordado trabajar conjuntamente en hacer posible esa voluntad, siempre desde la transparencia, para encontrar un espacio que permita la posibilidad de construir un nuevo estadio", apuntó Barberá. La alcaldesa destacó que el Levante "va de la mano de Alejandro Escribano, que conoce el Plan General de Ordenación Urbana y se escudriñará toda la ciudad".

El presidente del Levante, Julio Romero, agradeció la "magnífica acogida" de la alcaldesa, que le aseguró el mismo trato que al Valencia CF, y de su equipo de Gobierno, quienes "han sabido escuchar las necesidades del club y las dificultades para hallar suelo". Romero reiteró que la voluntad del consejo de administración del Levante es que el estadio permanezca en Valencia, "no en ningún otro sitio". La idea inicial sería acondicionar un estadio de 25.000 a 30.000 plazas, lo que supondría hallar una parcela de al menos 30.000 o 40.000 metros cuadrados.