Experiencias fronterizas
Una exposición del Marco analiza los límites físicos y mentales
Analizar las distintas maneras en las que los límites influyen en nuestra visión del mundo es el objetivo de la exposición Entre Fronteras, que se inaugurará el próximo viernes en el museo Marco de Vigo. Entre los temas que se abordan a través de las obras de una veintena de artistas se encuentran el fenómeno de la inmigración, los conflictos históricos entre países y las tensiones entre realidad y ficción.
Las obras que forman la muestra exploran las diferentes formas en que la vida de las personas se ven afectadas por las fronteras. En los últimos años el mapa del mundo ha visto desaparecer y surgir nuevos límites. No es casualidad que entre los artistas invitados a Entre Fronteras haya varios de la antigua ex-Yugoslavia, una de las zonas del mundo que más cambios fronterizos ha sufrido en las últimas décadas. Por ejemplo, el artista kosovar Albert Heta presenta un vídeo en el que podemos asistir a la peripecia de una madre con sus dos hijos que consiguen sobrevivir al conflicto bélico tras cruzar una frontera.
Este mismo artista inventó en 2005 un pabellón ficticio para la Bienal de Venecia de ese año. El presunto Pabellón Kosovar nunca llegó a existir pero sí que había un enlace en Internet que ofrecía información sobre el mismo y eso bastó para que muchas personas diesen por hecho que el pabellón había existido. Los intentos por mezclar realidad y ficción son característicos en la historia del artista balcánico.
Barreras y controles
El español Santiago Sierra, otro de los participantes en la muestra, también se interesó por cuestiones fronterizas cuando impuso un control de acceso a la entrada del pabellón español para que sólo pudiesen pasar al mismo ciudadanos de esa nacionalidad. Una obra sobre esta experiencia estará también presente en las salas del Marco.
Desde una perspectiva totalmente diferente las argentinas Alejandra Riera y Fulvia Carnevale muestran en una instalación la miserable situación de explotación en la que se encuentran los pueblos indígenas de los Andes en la frontera que comparten Argentina y Bolivia. En los vídeos que forman la pieza pueden verse como las mujeres locales atraviesan los pasos fronterizos con sus mercancías. Una de sus fuentes de ingresos es la venta de ponchos a los turistas a través de las ventanillas del tren.
La comisaria de la exposición, Carolina Grau, considera que en muchas ocasiones las fronteras son más psicológicas que físicas, pero en ambos casos acaban por cambiar nuestro sentido de la identidad.
Esta experiencia la ha vivido el artista de origen italiano, Costa Vece, hijo de inmigrantes, que sufrió las consecuencias de las duras leyes de concesión de ciudadanía en Suiza. En su instalación Revolución-Patriotismo crea un territorio reservado a inmigrantes y apátridas. Es un país improvisado donde los que están dentro no pueden salir y los que están fuera tienen prohibida la entrada.
Otros artistas que participan en la exposición están Chantal Akerman, Maja Bajevic, Pierre Bismuth, Ergin Cavusoglu, Jun Yang, Guzmán de Yarza y Marine Hugonnier.
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