Arranca la gran fiesta del turismo

Viajar a Pekín o Shanghai no cuesta sólo unas 11 horas de avión. Si acuden a la XVII edición de Fitur, les bastará con una buena cola para llegar a las puertas de China, país que abre el recorrido del pabellón de Asia y África, el primero de la feria internacional de turismo de Madrid. Y así arrancó ayer al mediodía la kermesse turística española. Con un recorrido de los Reyes y Joan Clos, ministro de Industria, Turismo y Comercio a través de los encantos y las ofertas del mercado turístico mundial.

Un mercado en notable crecimiento, según destacó Francesco Frangialli, secretario general de la Organización Mundial del Turismo (OMT), y que ha traído a Madrid unas 13.000 empresas procedentes de más de 170 países. Y es que el año pasado viajaron por el mundo 842 millones de turistas.

El turista se queda menos días en España y gasta igual que en 2005

Las agencias de viajes están cada vez más especializadas

Más de 58 millones de extranjeros decidieron pasar por España, que, en palabras del Rey don Juan Carlos, se ha convertido en los últimos años en un "referente internacional". Así destacó el papel de la industria turística nacional, subrayando además la importancia de la "estrecha colaboración" entre la Administración y las compañías privadas. Frangialli también subrayó el protagonismo de España, que consolidó en 2006 el segundo puesto mundial tanto en llegadas y recepción de visitantes como en ingreso global del sector turístico. El secretario de la OMT recordó, sin embargo, que la industria y los operadores del sector deben "mantenerse alerta, porque la competencia de otros países está muy viva". Y, en estos días, también muy cerca.

Esa competencia estará presente hasta el domingo en Ifema, representada por las empresas de promoción turística de los países que en los últimos años se han transformado en nuevos destinos de europeos y españoles. Desde el tirón que ha experimentado el área del sureste asiático, por ejemplo Vietnam o Camboya, hasta algunos países de Ámérica Central, como Costa Rica, pasando por el auge de algunos destinos nórdicos, por ejemplo Escandinavia.

Pero también hay una lista de últimos llegados al Turismo. Entre ellos, cuatro nuevos huéspedes de la feria, listos para entrar en el mercado: Níger, Azerbaiyán, Armenia y Zimbabue. La presencia de dos países africanos es precisamente, según la OMT, una señal de un nuevo tipo de crecimiento de la industria turística mundial, "más moderado, más sólido, más responsable y más solidario". La organización prevé además una subida del turismo mundial del 4% para los próximos años, una tendencia que debería convertirse en la norma.

En cuanto a la oferta de las empresas que participan en la feria, un estudio previo sobre tendencias viajeras en Europa realizado por la consultora IPK y la feria de turismo de Berlín destaca su propensión a especializarse. ¿Por qué? Para el informe, el nuevo turista no es fiel a un único destino, busca cada vez más ofertas acordes con sus gustos o su manera de ser y, sobre todo, tiene más dinero y menos tiempo.

Esta última tendencia se refleja en los datos difundidos ayer por el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio. Los turistas que viajan a España se quedan menos tiempo, pero gastan un poco más. Cada uno de los extranjeros que han visitado España a lo largo de 2006 también ha dejado en sus destinos turísticos un promedio de 857 euros y ha gastado cada día hasta 91 euros, lo que supone, respectivamente un incremento del 0,3% y del 3% en relación con 2005.

Mientras que el número total de turistas ha subido un 4, 5%, la estancia media de cada visitante ha sido de nueve noches, lo que supone un descenso del 2,6% respecto a la media registrada el año anterior.

El gasto acumulado de los turistas extranjeros en 2006 subió en total un 4,7% y se sitúa en 48.181 millones de euros, según las cifras de la Encuesta de Gasto Turístico (EGATUR).

En diciembre de 2006 y durante las fiestas navideñas se registró un incremento significativo del gasto que avala estas tendencias. El promedio del consumo total por visitante aumentó en ese mes el 10,4% sobre 2005, situándose en 929 euros. El gasto global fue de 2.934 millones de euros, un 12,3% más que el año anterior, y los visitantes europeos (procedentes sobre todo de Reino Unido y Alemania) realizaron el 82,3% del consumo, aunque se quedaron en España sólo 10 noches, el 2,6% menos que en 2005. Estas cifras, sin embargo, contrastan con las estimaciones de la Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur), que apuntaban a un descenso del gasto medio por turista y un incremento menor del gasto total.