"Estoy entre escéptico y esperanzado"

Hangar (www.hangar.org) ha sido siempre un sitio difícil de encontrar, pero ahora es prácticamente imposible. Su emplazamiento en el recinto industrial de Can Ricart ya aparecía mal señalizado antes de que la gran reestructuración de la zona lo ocultara detrás de vallas y calles cerradas.

La situación empeoró drásticamente a raíz de la ocupación de unas naves de Can Ricart por parte del colectivo circense La Makabra y de su desalojo, el pasado 14 de diciembre. "Se construyó un muro, se cerraron las puertas metálicas y se restringió la entrada a un reducido grupo de personas", recuerda el director de Hangar, Pedro Soler. En protesta por la presión policial y el cerco a que estaba siendo sometido, la Fundación AAVC decidió cerrar Hangar. Tras tres semanas ha vuelto a abrir sus puertas. Ya no hay restricciones de acceso, tan sólo es necesario identificarse a la entrada, lo cual impide de facto la celebración de actos multitudinarios y abiertos al público. "Hangar no es un espacio de difusión, sino de creación y producción, por tanto la medida no nos impide trabajar, a pesar de que resulta incómoda, ya que por el centro pasan entre 40 y 60 personas cada día", indica Soler. Este número incluye 10 personas de plantilla, una quincena de artistas que ocupan los talleres (incluidos creadores ya consolidados como Eulalia Valldosera, Ricardo Iglesias, Joan Morey y Jordi Mitjà), los colectivos residentes (la distribuidora de vídeos Hamaca y la emisora de mujeres en Internet, Radio Paca) y los responsables y participantes de los Cursos de Formación Continua para Artistas Visuales y de los talleres Arduino para la creación digital.

"Estoy entre escéptico y esperanzado respecto al programa Barcelona Laboratori", afirma Soler. "El Ayuntamiento intenta contrarrestar las críticas de los sectores artísticos con un proyecto de red de fábricas para la creación que, por el momento, no tiene presupuesto ni programa concreto", añade Soler, quien está trabajando en la presentación de la nueva Red de Centros de Producción de Cataluña (www.xarxaprod.cat) que, a partir de finales de febrero, centralizará en un sitio web todas las ofertas para artistas: talleres, platós, becas, cursos, programas de residencia e intercambio y otros recursos. "Además, estamos preparando un documento de buenas prácticas, con el fin de establecer unas bases de funcionamiento éticas y eficaces, que abarquen las relaciones con el artista, los demás centros y el contexto social y administrativo", añade.

A pesar de no generar mucho ruido mediático, Hangar desarrolla una intensa labor de apoyo a la producción y es el único centro de Barcelona que ofrece de forma continuada una serie de servicios a los artistas visuales, no sólo alquiler de talleres y espacios, sino también equipos y técnicos para producir obras audiovisuales y con nuevas tecnologías. "Ofrecemos un servicio integral de producción también a galerías e instituciones. Recientemente hemos producido, por ejemplo, la exhibición de Joan Morey y la estatua móvil de Franco de Fernando Sánchez Castillo para el Centro de Arte Santa Mónica", señala Soler, destacando a continuación las dos líneas de actuación del centro: "Por un lado, el acceso público y democrático a las herramientas de producción y, por el otro, el apoyo a proyectos específicos de artistas de alto nivel como Antoni Abad, Montserrat Soto o Alicia Framis".