Progresión técnica y diseño rejuvenecido

Una línea con más fuerza y dos frontales para elegir. El nuevo Mercedes Clase C es más grande, refleja una atención especial por el diseño y ofrece un interior y un maletero mayores. Los motores ganan potencia y toda la gama incluirá de serie siete 'airbags', ESP y suspensión variable.

Evolución técnica y una pequeña revolución estética. El nuevo Clase C sigue las últimas tendencias y crece en tamaño para ampliar el espacio interior y la seguridad, al mismo tiempo que mejora su mecánica y equipamientos con motores más potentes que consumen menos, un nuevo chasis y una dotación de serie muy nutrida, sobre todo en sistemas de protección. Es un coche más completo y atractivo que además presta mayor atención al diseño. Más atrevido que el actual, se acerca a las identidades deportivas de los Audi A4 y BMW Serie 3, sus grandes competidores. La posibilidad de elegir entre dos frontales diferentes refuerza la originalidad de este modelo, porque la elección altera tanto la personalidad que casi puede hablarse de dos coches distintos. Esta solución, ya vista en el Peugeot 207, busca contentar a más clientes.

La tercera generación de la berlina media de Mercedes llegará en primavera. Primero se lanzará la carrocería cuatro puertas, y en 2008, la familiar. La marca no ha confirmado si habrá una variante cupé de tamaño compacto, el equivalente al Sportcoupé de ahora. Tampoco se han anunciado los precios, pero se estima que estará disponible desde 33.500 euros en gasolina (180 K) y 35.000 euros en gasóleo (200 CDi).

El nuevo Clase C mide 4,58 metros de largo, 5,5 centímetros más que el actual, y es 4,2 centímetros más ancho. Este crecimiento amplía la habitabilidad y, como la altura apenas varía, estiliza también la línea. La imagen muestra mayor fuerza sin perder distinción, y el interior, con acabados y materiales refinados, transmite la calidad que se espera de un modelo de prestigio.

Paquete deportivo opcional

La carrocería es un 13% más rígida, y junto al nuevo chasis, que estrena vías más anchas, una dirección más rápida y suspensiones variables, el conjunto promete una conducción más confortable y eficaz en todos los trazados. En otoño de 2007 se ofrecerá un paquete deportivo opcional con tres aspectos diferenciadores: dirección aún más directa, botón sport para agilizar la respuesta del acelerador y del cambio automático (si lo lleva) y suspensión electrónica, que va adaptando los amortiguadores en todo momento, en vez de ofrecer dos ajustes de dureza determinados (como la de serie).

Los motores son los mismos que había antes, aunque algunos ganan potencia y gastan menos. La versión 200 CDi pasa de 122 a 136 CV, y la 220 CDi, de 150 a 170 CV y consume 0,3 litros menos. El 320 CDi V6, tope de gama en diésel, mantiene los 224 CV. En gasolina, el 180K sube de 143 a 156 CV y gasta 0,3 litros menos, y el 200K rinde 20 CV más, hasta 184 CV, y consume 0,5 litros menos. Los 230, 280 y 350, todos V6, permanecen igual.

Los propulsores se benefician de una aerodinámica excelente (CX: 0,27) y alcanzan una velocidad más elevada de lo normal. Vienen de serie con cambio manual de seis marchas, salvo el 350 V6, que monta el automático 7G-Tronic de siete marchas (opcional en los V6). El equipamiento se estructurará en tres acabados: Classic, Elegance y Avantgarde. Y todos vendrán muy completos en seguridad, con siete airbags, ABS, ESP y reposacabezas activos, aparte de climatizador y radio-CD con teléfono. Como opción se podrán montar casi todos los dispositivos y tecnologías de su hermano mayor, el Clase E, como el sistema Presafe o los faros inteligentes.