El transporte público apenas cubre el acceso a los hospitales

La red de transporte público entre los hospitales y los núcleos urbanos periféricos de las grandes capitales es deficitaria y en algunos casos inexistente. Al usuario no le queda otra alternativa que recurrir al vehículo particular. La Consejería de Sanidad lejos de subsanar esta carencia apuesta ahora por privatizar los aparcamientos de los centros sanitarios con el consiguiente perjuicio económico para pacientes, familiares y personal laboral. El departamento de Rafael Blasco, en una respuesta al Síndic de Greuges, señala que garantizar el acceso a los hospitales no es de su competencia.

La red valenciana de transporte público olvida los hospitales. La conexión de los centros sanitarios con las localidades periféricas de las grandes ciudades es "desastrosa". La Consejería de Sanidad admite el "problema", según responde el departamento de Rafael Blasco a un requerimiento de la Sindicatura de Greuges, pero remarca que se trata de un "fenómeno exógeno a la actividad sanitaria" y "excede" su ámbito de competencias.

La respuesta de Sanidad motivó la reacción de CC OO que considera que Sanidad es la "responsable directa de facilitar y posibilitar la accesibilidad a los hospitales públicos, mejorando las vías de acceso, de aparcamiento y de transporte público".

Blasco, sin embargo, ha optado por privatizar los aparcamientos de los centros hospitalarios "abundando" aún más en el agravio que ya sufren pacientes, familiares y trabajadores de los hospitales ante la deficitaria red de transporte público. Sanidad ya ha adjudicado las obras de los aparcamientos de la Vila Joiosa y el de Arnau de Vilanova. Quedan pendientes por conceder las instalaciones del hospital Doctor Peset de Valencia, el Hospital de Alcoy y el General de Alicante.

La medida ha acarreado enérgicas protestas entre los usuarios y el personal laboral, en tanto que les obliga a abonar las tarifas que acuerde la empresa adjudicataria. Las movilizaciones han sido contundentes en el caso de la comarca de La Marina Baixa. Su hospital, que atiende a 160.000 turistas sin contar con la extraordinaria población flotante, sufre graves problemas de accesibilidad. La decisión de privatizar ha propiciado, desde el pasado 5 de junio, paros de la plantilla de cinco minutos como medida de protesta.

El panorama es especialmente grave en las provincias de Alicante y Castellón. Los escasos autobuses que conectan las pequeñas poblaciones con los centros sanitarios sufren demoras de hasta dos horas. En otras muchas, simplemente no hay enlace público con los hospitales como es el caso de Dénia, La Vila Joiosa, o el Hospital de La Ribera en Alzira, o doctor Moliner, en el término de Serra, en Valencia. En este caso, Sanidad ha contratado con una empresa privada una línea de autobús gratuita con una frecuencia media de dos horas. Arturo León, de CC OO, apunta: "Si familiares de enfermos ingresados en este centro, ubicado a unos 35 kilómetros de la capital, necesita trasladarse fuera del horario preestablecido no tienen más alternativa que recurrir a un vehículo particular o pagar un taxi, a una tarifa de 24 euros".