Signes critica la pasividad del Consell ante los vertidos al mar

El secretario de Medio Ambiente, Agua y Agricultura del PSPV-PSOE, Francesc Signes, calificó ayer de "bochornosa" la "pasividad" del Consejero de Territorio y Vivienda, Esteban González Pons, ante los 48 puntos de vertidos incontrolados de aguas residuales existentes en la Comunidad Valenciana. El responsable autonómico reconoce la existencia de los vertidos que fueron detectados en verano de 2005 y que afectan a los ecosistemas de 29 municipios.

Esteban González Pons reconoce 48 puntos con vertidos incontrolados en el litoral valenciano

Ante una pregunta parlamentaria del diputado de Els Verds-Esquerra Ecologista Carles Arnal, González Pons reconoció la existencia de los 48 vertidos incontrolados en las costas de la Comunidad. Francesc Signes advirtió ayer de que "ante unos datos así, o el conseller tiene previsto un plan para eliminarlos o dimite, ya que no puede alegar ignorancia".

Para el PSPV, los vertidos generan "un gran impacto" en la costa y responsabiliza al Gobierno de la Generalitat por la falta de inversión en las depuradoras que tratan el agua vertida al mar. "Las aguas residuales de las urbanizaciones del norte de la Comunidad se están vertiendo sin ningún tratamiento previo", declaró Signes, que denunció que la pequeña depuradora de Sagunto es la única de la zona.

El secretario de Medio Ambiente socialista echó en cara al actual gobierno que 17 de los 21 emisarios de agua residual existentes en la región fueron construidos entre 1988 y 1994, por orden del ex presidente socialista Joan Lerma. Para Signes, fueron levantados por gobiernos "con una verdadera política del agua". El Consell de Francisco Camps no ha añadido ningún emisor de agua residual en los últimos cinco años.

La Consejería de Territorio eludió ayer hacer una valoración de las críticas de los socialistas. En cambio, anunció que el consejero ha solicitado por carta una entrevista urgente al comisario europeo de Mercado, Interior y Servicios, Charlie McCreevy. González Pons quiere trasladar a la Unión Europea su malestar por la indefensión de la Generalitat ante el dictamen de la Comisión Europea en materia urbanística emitido el pasado octubre.

Territorio considera que las alegaciones del Gobierno de la Comunidad Valenciana fueron "manipuladas" por el Gobierno central en un intento "interesado" de condenar la política urbanística valenciana ante la UE. González Pons advierte a McCreevy en la carta de que el Ministerio de Asuntos Exteriores modificó sus alegaciones para provocar "la desinformación de la Comisión" y así alterar la comprensión europea de la realidad jurídica de la Generalitat.