Moratinos destaca las dificultades de la OSCE
El ministro de Exteriores de España, Miguel Ángel Moratinos, se explayó ayer en un análisis de la "etapa complicada" que atraviesa la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), antes de exponer al Consejo Permanente los objetivos, más bien vagos, que se ha fijado para el año en que dirigirá el organismo. España asumió el 1 de enero la presidencia de este foro que, tras favorecer la concordia en la Europa de los bloques, se ve hoy sometido a las tensiones de la Europa de las nacionalidades.
"La situación en la que nos hallamos no es fácil", dijo el ministro, que hizo un detallado repaso de "lo mucho que queda por hacer para fortalecer la coexistencia en los Balcanes", de la persistencia de los conflictos secesionistas congelados (Osetia del Sur, Absajia, Trasnistria y Nagorno-Karabaj), de la difícil transición a la democracia de muchos nuevos Estados y de la extensión de la intolerancia.
"Me preocupa profundamente que las relaciones entre algunos Estados sigan siendo tensas", subrayó Moratinos. Desde 1999, los 56 miembros de esta organización no han alcanzado el consenso indispensable para cerrar la presidencia anual con una declaración conjunta de conclusiones.
El ministro dijo que "la presidencia española va a trabajar para que se recupere el espíritu de familia y se llegue a una declaración final", en la cumbre ministerial que se celebrará en Madrid el 29 y 30 de noviembre. Las esperanzas españolas se centran en la política medioambiental y antiterrorista. Zaragoza será sede en marzo de una conferencia sobre control de aguas y degradación del suelo. En materia antiterrorista, Moratinos aspira a que esa política pase a integrar el marco de la OSCE.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.