El PP lleva al Parlament la fiesta 'rave' para abrir un debate sobre seguridad
Los conservadores reclaman la comparecencia de Saura
Francesc Vendrell, portavoz del PP en el Parlament, anunció ayer que su partido exigirá la comparecencia en la Cámara del consejero de Interior, Joan Saura, para que explique la "pasividad" de los Mossos en la fiesta rave celebrada durante el fin de año en un cámping de Polinyà, donde murió atropellado un joven francés que toreaba coches en la carretera. El PP pretende con ello abrir un debate sobre la seguridad.
La población no tiene sensación de inseguridad. Ésa es, al menos, la opinión expresada ayer por Joan Saura. El consejero de Interior aseguró que el índice de criminalidad en Cataluña es inferior al de la media europea, pero admitió que la percepción ciudadana puede ser distinta, porque "cosas como el atentado de ETA incrementan la sensación de inseguridad", igual que "dos o tres delitos brutales" como el asesinato del empresario Joan Alsina la semana pasada. El consejero negó que Cataluña sea un paraíso para las bandas internacionales y achacó la proliferación de cierto tipo de delincuencia a "ciertas desventajas" de la Europa sin fronteras. Como solución, propuso medidas de alcance internacional y cooperación europea en materias como información sobre datos bancarios o huellas dactilares.
Saura se refirió también a los desalojos de colectivos okupa en Barcelona. "La justicia manda", aseguró, y dijo que se habían dado las órdenes correspondientes para que se haga "de la mejor forma posible".
Tolerancia
Saura tiene una opinión radicalmente diferente a la del Partido Popular, que ve el cúmulo de hechos como un síntoma de una creciente "inseguridad ciudadana". De ahí que Vendrell anunciara ayer que Saura debe acudir al Parlament para dar explicaciones de la "pasividad" mostrada, en opinión del PP, por los Mossos en esa noche. Los populares han acusado reiteradamente a Saura de ser excesivamente tolerante con movimientos alternativos de todo tipo, desde los grupos de la fiesta rave ilegal hasta los okupas.
La fiesta rave que congregó a millares de jóvenes en el cámping situado en la carretera C-155, entre Polinyà y Palau,empezó la noche del sábado 30 de diciembre y acabó la mañana del martes 2 de enero. El domingo por la mañana, la alcaldesa de Palau, Teresa Padrós, y la de Polinyà, Pepita Pedrazo, dieron parte a los Mossos de la presencia masiva de jóvenes, coches y furgonetas en el antiguo cámping. Padrós aseguró que habló hasta tres veces con Saura, para frenar la situación. El lunes por la tarde, los Mossos pusieron controles en las rotondas de acceso a la carretera que lleva al cámping. La muerte del joven francés se produjo la noche de fin de año.
Vendrell no está de acuerdo con la actitud "pasiva" del consejero de Interior. "Saura no desalojó a estos colectivos porque no quiso. No es de recibo que Saura salga diciendo que hacía falta una nueva ley para desalojar a los participantes de la fiesta de Polinyà", afirmó, y desechó como una mala excusa la falta de un marco legal adecuado para desalojar a los participantes.
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