Un moroso en la Copa del América

Un bochornoso espectáculo podría acompañar a las regatas de la Copa del América, que se disputarán este año en aguas de Valencia, si uno de los equipos de la competición no entra en razón y se convence la conveniencia de pagar a la Seguridad Social en España.

La posibilidad del embargo de los bienes del +39 Challenge -uno de los tres italianos intervinientes-, literalmente todo lo que tenga en el puerto español, está cada día más cercana desde que el mecanismo antifraude de la Secretaría de Estado de la Seguridad Social detectó que no ha pagado una sola cuota desde que se encuentra trabajando en España -para los que trabajen en departamentos de personal: no han presentado los boletines de cotización TC1 y TC2-. El embargo afectaría a "todo lo que tenga en territorio español", según confirmaron fuentes de la Tesorería del mencionado organismo.

Los equipos de la prestigiosa competición velera tienen un estatus privilegiado ante Hacienda. Por ley, están exentos de todas las cotizaciones a la Seguridad Social, excepto las que corresponden a sus trabajadores. Pero incluso en este apartado tienen una bonificación del 95% de la cantidad que les correspondería. No les debió parecer suficiente generosidad a los gestores del +39 Challenge, que consideran, según comentan fuentes de la Seguridad Social, que no deberían pagar nada.

"La norma se va a cumplir de manera tan tajante como con cualquier otra empresa", afirman las fuentes consultadas en la Tesorería. No obstante, no dan la negociación por perdida: "Otra cosa es que se busquen caminos de solución". "La Copa del América es larga", afirman, dando a entender que, mientras el barco permanezca en Valencia, es posible el acuerdo para cobrar.

Las mismas fuentes aseguran que los responsables del +39 Challenge ya han depuesto su actitud inicial y se muestran dispuestos a buscar una solución. La cantidad que adeudan es de 90.000 euros, sin aplicar las bonificaciones previstas por la ley. Porque, al no presentarse los papeles en su momento, las han perdido y ahora tienen que pagar el 100%.

El +39 Challenge presentó el pasado 26 de octubre, en el puerto de Valencia, el velero ITA 85, el nuevo barco de 34 toneladas con el que participará en la Copa Louis Vuitton, clasificatoria para la del América, en la que aguarda el campeón vigente, el Alinghi, suizo. Según se explica en la página web oficial de la competición, en él se han invertido más de 40.000 horas de trabajo entre el diseño y la construcción. El jefe del equipo, Luca Devoti, estaba "eufórico", ajeno a la posibilidad de que todo su trabajo acabe en manos del Estado y subastado. Según la web del equipo, está patrocinado por el Gobierno de Sicilia, la empresa de calzado deportivo Sergio Tacchini, el confeccionador de sedas Yamayay, la empresa de videojuegos Dbline, la de diseño de ropa y complementos Gilli y la compañía de seguros Fondiaria-SAI.

Cada año, la Seguridad Social embarga por impago alrededor de siete millones en bienes muebles y unos 70.000 en bienes inmuebles, que después salen a subasta. En total, se ejecutan anualmente unos ocho millones de embargos. El criterio, según fuentes del departamento, no es embargar por principio, sino lograr que la gente pague, para lo cual se negocian aplazamientos. Esto es lo que se está intentando con el +39 Challenge.

Éste no es el primer equipo que planta cara a la Seguridad Social. Otro de los 12 participantes faltó a sus obligaciones en octubre y diciembre de 2005. El organismo público, tras su negativa explícita a ponerse al día, le embargó sin contemplaciones una cuenta corriente. La medida tuvo su efecto y desde mayo de 2006 paga religiosamente y ha negociado un aplazamiento para los meses pendientes. Las fuentes consultadas solicitaron que no se hiciera público su nombre, ya que la situación "se da por solucionada". La cuenta, eso sí, sigue embargada.