Discreción estética y despliegue tecnológico
Una berlina exclusiva con una imagen elegante y discreta que no refleja su calidad y sofisticación tecnológica. Así es el nuevo Honda Legend, el buque insignia de la marca japonesa con una de las ingenierías más prestigiosas del sector del automóvil. Tiene un precio elevado (57.700 euros) pero lo justifica con una mecánica avanzada y sobre todo con un equipamiento que incluye de serie desde una tracción 4x4 innovadora al radar antichoque, la cámara trasera para aparcar y multitud de detalles más que normalmente se pagan aparte hasta en los modelos más elitistas. El modelo de Honda no impacta por su estética, pero funciona de forma impecable y ofrece el confort y seguridad de las berlinas más refinadas.
Elegancia con dinamismo
El nuevo Legend no sigue la tendencia de moda en muchos modelos nuevos y es más pequeño que el anterior. Ahora mide 4,95 metros de largo, casi cuatro centímetros menos, pero es más alto y ancho. Estas medidas le sitúan un escalón por debajo de su predecesor para competir con los BMW Serie 5, Audi A6 y otros. Y así, evita luchar con las grandes berlinas de lujo (Serie 7, Audi A8...) feudo de las marcas alemanas de prestigio.
La línea prima la discreción y la aerodinámica. Su silueta en cuña, con el capó delantero muy bajo, la parrilla inclinada hacia atrás y unos faros muy rasgados, aporta un estilo afilado y un suave toque deportivo. El dinamismo se refuerza con una zaga corta inspirada en los cupés que integra un pequeño alerón sobre el maletero y la doble salida de escape. Pero la vista lateral y la cintura de las puertas definen la línea clásica de las berlinas.
El resultado es un coche elegante que pasa casi desapercibido y hasta parece más pequeño de lo que es. Y no transmite la calidad y tecnologías que incluye. Sin embargo, Honda ha carenado toda la zona inferior para lograr una aerodinámica casi récord (CX:0.29). La carrocería aplica aceros especiales y aluminio en muchas piezas para contener el peso. Y su refinamiento se aprecia en múltitud de detalles, como los cristales de las ventanillas, que van enrasados en las puertas, o el capó delantero, que se eleva automáticamente en caso de choque para reducir los daños a los peatones. Además, estrena un sistema de cancelación del ruido (ANC) que emite por el equipo de música unas ondas de sonido opuestas a las del motor para anular el ruido de la mecánica.
Boletín
Un interior clásico y refinado
A pesar de ser más pequeño por fuera, el Legend es más amplio que el anterior, pero sigue sin destacar por su habitabilidad. Su mayor anchura y altura aumentan la sensación de desahogo y ofrece unas plazas delanteras amplias y unas traseras más discretas, aunque con suficiente altura y espacio para las piernas. En cambio, faltan huecos para objetos, porque sólo tiene la guantera, las bolsas de las puertas, un cofre en el apoyabrazos central, dos posavasos delante y dos atrás, y poco más. Y un buen maletero de 452 litros.
Dentro de su clasicismo está bien acabado, aplica plásticos y maderas de calidad, y presenta un diseño moderno y elegante que se palpa en detalles como el salpicadero, la consola central y los mandos. Además, las suspensiones permiten viajar como si navegara sobre el asfalto, reducen al mínimo los balanceos y ofrecen un confort sobresaliente que sólo disturban algunos rumores de rodadura.
Máximo equipamiento
El Legend se vende en versión única con un motor 3.5 V6 de 295 CV y cambio automático secuencial de cinco marchas. Es caro, 57.700 euros, pero incluye un equipo de serie que le distingue por su generosidad y tecnología, incluso frente a las berlinas más exclusivas. Así, viene con todo lo habitual: seis airbags, ABS, control de estabilidad, climatizador, radioCD con cargador... Añade detalles menos comunes, como tracción 4x4, asientos delanteros eléctricos, ventilados y calefactados, tapicería de cuero, techo solar, y sobre todo un control de velocidad (ACC) con radar antichoque (CMBS) que frena al detectar riesgo de colisión, faros de xenón que giran en las curvas, navegador en color con pantalla táctil y
mandos orales, cámara para aparcar.... Y tres años de garantía sin límite de kilómetros.
Conclusión
El Honda Legend es una berlina exclusiva para quienes valoran la calidad tecnológica y huyen de la ostentación. No llama la atención, pero es cómodo, ofrece una mecánica impecable, una estabilidad y seguridad a toda prueba, y un equipo de serie con todos los caprichos que justifica su precio y evita gastos suplementarios.
EL LUJO ES LA TECNOLOGÍA
El interior del Legend presenta un diseño moderno, sencillo y elegante que crea un ambiente cuidado y acogedor sin caer en la ostentación. El salpicadero combina unos plásticos grises en tonos suaves muy similares a los de la tapicería de cuero, e integra en el centro una banda central de madera que realza el conjunto. Destaca también el formato compacto y atractivo de la consola central, y el volante, que integra los mandos de casi todos los accesorios. Y los asientos delanteros, que incluyen ocho posiciones, memoria, calefacción y ventilación. Pero el lujo es la tecnología, y encima de la consola central lleva la pantalla táctil del navegador, que incluye mandos orales y al insertar la marcha atrás proyecta también las imágenes de la cámara trasera de ayuda para aparcar. Al igual que casi todos los coches japoneses, el Legend no tiene en la habitabilidad su punto fuerte. Es amplio por dentro, pero no tanto como se espera de su tamaño: ofrece un espacio correcto para las piernas en las plazas traseras, aunque sin alardes. Y con el maletero sucede igual, porque tiene 452 litros, pero es más pequeño que el de sus rivales europeos. La zaga resulta anodina y sólo destacan los pilotos con diodos (led's), un alerón muy discreto y la doble salida de escape.
EQUIPAMIENTO IMBATIBLE
El Legend es más caro que las berlinas de su tamaño, pero no hay ninguna que ofrezca un equipo de serie tan completo. Y si se adquiere como opción eleva la factura muy por encima del precio del modelo japonés. El nuevo Honda cuesta 5.300 euros más que un Audi A6 equivalente y 4.000 más que un BMW 530 Xi (4x4). Pero sólo el navegador y la tapicería de cuero, opcionales en ambos, igualan la diferencia, y habría que añadir muchos detalles más, como el radar antichoque, los asientos con memoria o la cámara para aparcar. La diferencia con el Lexus GS 300 se reduce a 3.300 euros y baja a 2.200 frente al Mercedes E 350 4M. Pero sucede como con los anteriores. El primero puede incluir techo solar, navegador y cámara de aparcamiento por 4.170 euros más. Y en el Clase E, sólo el navegador (3.927) cuesta más que el sobreprecio del Legend.
