Urbanismo revisará las licencias de Foz por el "preocupante" aumento de viviendas
Lueje asegura que el urbanismo del municipio es insostenible y distinto al que quiere la Xunta
Los inspectores de la Xunta examinarán los nuevos edificios de Foz para determinar si la construcción se ajusta al planeamiento vigente en el municipio. El director general de Urbanismo, Ramón Lueje, anunció que ordenará una revisión de las licencias al alcalde socialista, José María García Rivera, si se detectan irregularidades. Lueje calificó el "preocupante" crecimiento de Foz de "insostenible y muy distinto al ejemplo que pretende la Xunta". El Colegio de Arquitectos pide a los municipios de la Mariña lucense que tomen el ejemplo de los municipios asturianos.
Política Territorial realizará un muestreo para corroborar si los permisos para construir 3.600 viviendas otorgados por el alcalde de Foz, José María García Rivera, del PSdeG, se ajustan a las normas subsidiarias que rigen el urbanismo del municipio. Ramón Lueje anunció que cuando comience la edificación de las 3.600 viviendas, "los inspectores revisarán si se ajustan al planeamiento, tal y como exige la ley". "Es lo único que la Xunta puede hacer, porque la jurisprudencia del Tribunal Constitucional impide a la Administración autónoma anular decisiones tomadas por los ayuntamientos", señaló Lueje. "Si detectamos irregularidades", continúa el responsable de Urbanismo, "pediremos al gobierno local que revise de oficio las licencias, y, si no lo hace, presentaremos un recurso contencioso administrativo".
Pese a no tener competencias para revocar el acto administrativo de un alcalde, el director xeral de Política Territorial reconoció que el modelo de Foz es "preocupante y muy distinto al que defiende la Xunta de Galicia, porque no garantiza el desarrollo sostenible y no es un buen ejemplo para el resto de ciudades y villas". " Los resultados de la edificación están a la vista de todos", concluyó Lueje, que quiso separar los casos de Foz y el de Barreiros, donde la Xunta ha detectado licencias nulas de pleno derecho y permisos otorgados por el alcalde popular Alfonso Fuente con el informe desfavorable de los técnicos municipales.
A la fiebre constructora en la costa de Lugo se refirió también ayer el presidente del Colegio de Arquitectos de A Coruña. Alberto Unsain pidió a los alcaldes de A Mariña que tomen ejemplo de lo que sucede al otro lado de la ría. Recordó que mientras en Foz y Barreiros se conceden licencias para duplican sus actuales cascos urbanos con miles de viviendas, en Asturias desarrolla un urbanismo mucho más comedido y racional. En el lado asturiano de la ría de Ribadeo, otros ayuntamientos turísticos como Tapia de Casariego y Navia, con 4.300 y 9.100 habitantes, respectivamente, sólo otorgaron este año permisos para construir menos de 100 viviendas. Unsain considera que la comparación debe utilizarse para poner coto al crecimiento desordenado del litoral gallego: "¿Dónde va a vomitar su basura o sus aguas residuales la gente que viva en esas 3.000 viviendas nuevas?" que se autorizaron en Foz o en Barreiros, se pregunta el presidente de los arquitectos coruñeses. Unsain aplaude el anuncio de la Xunta de establecer un plan de ordenación del litoral gallego que resulta "imprescindible" y llama a tener en cuenta el gran retraso que arrastra Galicia respecto a los vecinos de la cornisa cantábrica.
"Estrategia del PSOE"
El PP atribuyó a una estrategia de partido las decisiones adoptadas por la Consellería de Política Territorial en materia de urbanismo. La diputada Pilar Rojo aseguró que "el repentino celo urbanístico de María José Caride forma parte de una estrategia del PSOE para distraer la atención sobre implicaciones de los cargos socialistas". Rojo insistió en que, "pese a los intentos de la Xunta de criminalizar a los alcaldes populares, la única condenada en Galicia por cuestiones urbanísticas ha sido la ex alcaldesa de Cabanas".
Ramón Lueje recordó al Partido Popular que "el celo por corregir las irregularidades urbanísticas y por el cumplimiento de la ley lo mostró la Xunta actual desde el primer día para corregir los errores del pasado, que están a la vista de todos".
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