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Prisión para el conductor que ocultó que había otros dos accidentados

Según el forense, uno de los jóvenes no murió en el acto

El Juzgado número 3 de Santander decretó ayer el ingreso en prisión sin fianza del hombre de 21 años que el viernes por la noche tuvo un accidente en la S-10 cuando conducía bebido, y ocultó supuestamente la existencia de dos de sus acompañantes que perdieron la vida al salir despedidos del vehículo. Adrián G. B. deberá responder de tres delitos. El forense ha comunicado al juez que uno de los jóvenes no murió en el acto.

El vehículo en el que viajaban cuatro jóvenes, árbitros de la Liga regional de fútbol, se salió de la vía en el término municipal cántabro de Camargo cuando circulaba a unos 150 kilómetros por hora en un tramo en el que la velocidad estaba limitada a 100. Chocó contra un muro de protección y cayó a una zona de marisma. El juez imputa dos delitos de homicidio por imprudencia, otro de conducción temeraria y un tercero de omisión del deber de socorro al conductor, de 21 años y que resultó herido leve. Éste, al igual que su acompañante, de 18 años y herido grave, dijo a los Bomberos y a los agentes de la Guardia Civil de Tráfico que sólo ellos viajaban en el vehículo.

Sin embargo, a la mañana siguiente fueron hallados a 40 metros del siniestro los cadáveres de los otros dos ocupantes del automóvil, de 19 y 26 años, que salieron despedidos del vehículo al no llevar el cinturón abrochado. El conductor arrojó una tasa de alcohol que doblaba la permitida. El abogado del conductor aseguró ayer que éste "no se acordaba de nada por el estado en el que se encontraba como consecuencia del golpe" y que lo ocurrido es "un accidente como los demás que se ven todos los días". También señaló que la tasa de alcohol de su cliente es "bastante normal en estos casos".

El forense aún no ha podido determinar la hora de la muerte de los dos hombres, pero sí le ha informado de que uno de ellos no murió en el acto. El magistrado Fernando Vegas razona en el auto de prisión, al que ha tenido acceso Efe, que "es posible que a la llegada de la fuerza policial al lugar del accidente uno de los viajeros hallados a la mañana siguiente aún se encontrase con vida".

En el auto, el juez también detalla cómo antes del siniestro el conductor realizó "maniobras incorrectas y peligrosas, como adelantamientos por la derecha en una vía rápida con circulación concurrida, con grave riesgo para los restantes usuarios de la vía".

Las razones que justifican el ingreso en la cárcel de Adrián G. B. son: la gravedad de los delitos que se le imputan, entre ellos dos homicidios, la posibilidad de que se fugue y el riesgo de que "cometa otros hechos delictivos análogos, ya que podría poner nuevamente en peligro la seguridad del tráfico".

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Por otra parte, los Mossos d'Esquadra detuvieron ayer al conductor de un vehículo de nacionalidad francesa que chocó frontalmente con un camión en La Jonquera (Girona). Los dos conductores resultaron ilesos, pero el hombre de 32 años que viajaba en el turismo fue detenido porque presentaba una tasa de alcohol cuatro veces superior a la permitida. En Jaén, pasaron a disposición judicial dos hombres de nacionalidad marroquí, de 26 y 24 años, porque conducían a gran velocidad e intentaron atropellar a los agentes que trataban de detenerlos.

Durante el fin de semana, un total de 30 personas perdieron la vida en las carreteras y otras 12 sufrieron heridas graves.

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