Blanco se fija como prioridad "desterrar el engaño de Camps"
Pla asume unas "elecciones duras ante la maquinaria de control social del PP"
El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, anunció ayer en Valencia una campaña sin tregua contra el PP para "explicar los logros del Gobierno central" y "desterrar del imaginario de los electores valencianos la mentira y el engaño del Ejecutivo de Camps". Como aperitivo, desgranó algunas de las inversiones públicas estatales en la Comunidad Valenciana que "en sólo dos años y medio de Gobierno socialista, duplican las de los dos Gobiernos de Aznar".
"Ya está bien de que para Camps la causa de todos sus males sean Zapatero y Zaplana"
"Frente al victimismo de Camps, el Gobierno socialista está recuperando el tiempo perdido en inversiones públicas", arengó Blanco a la plana mayor de los socialistas valencianos congregados en el Comité Nacional del PSPV-PSOE. "Y es que hay una realidad que va a permitir que el AVE Madrid Comunidad Valenciana llegue en 2010", especificó Blanco al hilo de lo dicho por Ignasi Pla, secretario general de los socialistas valencianos y candidato a la Generalitat en las elecciones del 27 de mayo.
Pla había explicado cómo en dos legislaturas de Gobierno central del PP "sólo se licitó el 1,5% de las obras del AVE", mientras que "en dos años y medio, la ministra de Fomento ha licitado ya el 100%". El botón de muestra, según ambos dirigentes, forma parte de la estratega del Gobierno central para "explicar a los valencianos, los logros de la gestión de Zapatero" y "desterrar del imaginario de la gente el engaño de Camps".
Un presidente al que Blanco acusó de "empeorar la herencia del Gobierno de Zaplana, su predecesor". Un alegato que justificó con "datos objetivos" como son los "indicadores" de producción industrial, competitividad, servicios públicos, transporte público.
"Ya está bien de que para Camps la causa de todos sus males sean el presidente Zapatero y Zaplana". Blanco atribuyó la "debilidad" de Camps en sólo tres años de Gobierno autonómico a que ha fallado en sus prioridades. "Camps sólo ha tenido tres prioridades durante su mandato: Controlar a su partido y aún así no lo tiene controlado"; "tratar de frenar los escándalos que surgen de los cargos públicos del PP y, sin embargo, cada vez hay más"; y, por último, "ver cómo puede proteger a los especuladores sin que se notara mucho".
Blanco se fijó como prioridad recuperar la Generalitat para los socialistas, "no sólo porque es necesario un cambio de modelo económico y social para el crecimiento de la Comunidad Valenciana", sino porque es "básica para España", como lo fue Galicia. "Me preguntan por qué vengo tanto a Valencia", ironizó Blanco.
El envite, reconoció Pla, no será fácil. "Será una campaña dura, unas elecciones reñidas", porque la derecha desplegará toda "la maquinaria de control social y propaganda de Camps. En seis meses se ha gastado 10 millones de euros en publicidad y manipulación". Pla, no obstante, trató de inocular el virus de la victoria a los suyos, contando que tiene "un plan de choque, con medidas urgentes para aplicar el primer año de Gobierno", para frenar la "pérdida de competitividad", resolver "problemas vitales para los ciudadanos como la falta de vivienda" -para lo cual fijará por ley que el 50% de las viviendas sean de protección-, y subir la inversión pública en I+D en un 25%.
No al indulto de Vilanova
El secretario de organización del PSOE, José Blanco, adelantó que el Gobierno tiene la intención de "hacer cumplir su penitencia" al alcalde de Vila-real, Manuel Vilanova, condenado a ocho años de inhabilitación por un delito de prevaricación. Vilanova ha solicitado la suspensión de la ejecución de su sentencia, dictada por el Tribunal Supremo, hasta que la Audiencia provincial resuelva sobre la petición de indulto (que avaló con 8.000 firmas) o exija su dimisión del cargo de alcalde.
Blanco asistir a la proclamación del candidato socialista a la alcaldía, José Benlloch. Allí, se refirió a Vilanova como el protagonista de un "espectáculo lamentable" y "ejemplo de la doble moral del PP", en casos de corrupción, y de "cómo entiende el poder".
Blanco, sin embargo, fue contundente al aventurar que el todavía alcalde que "presume de creyente" y que mantiene la esperanza de que "un Gobierno socialista le redima, debería saber que cuando uno peca, debe cumplir su penitencia". "En democracia, no hay todopoderosos, aunque algunos se lo crean", añadió en referencia al presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, imputado por la posible comisión de varios delitos contra la Administración pública y posible fraude fiscal.
"No sé qué tendrá Fabra para que todo el PP y Mariano Rajoy dejen de cumplir su propia palabra", remató Blanco, quien sostuvo que el Gobierno de Camps, "es cómplice tanto de lo que hace Fabra como Vilanova". Una posición, remató, que "sólo las toman quienes no creen en la democracia sino en el poder por el poder".
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