_
_
_
_

Opeth muestra en Bilbao las múltiples influencias de su 'death metal'

El metal será protagonista hoy (20.30; 28 euros, 25 en venta anticipada) en la bilbaína sala Santana 27 con la actuación de Opeth. El quinteto sueco cerrará una pequeña gira española, con escalas en Barcelona y Madrid, en la que promociona las canciones de Ghost reveries, su octavo disco, en el que combina elementos del black metal, el folk, el jazz, la música clásica y la gótica. Es la última entrega grabada en estudio por el grupo, que más recientemente ha publicado el directo Lamentations: live at Shepherd's Bush Empire 2003.

Opeth debutó en 1994 con Orchid, un estreno que incluía hasta reminiscencias jazzísticas. En discos posteriores afloraron recursos de otros géneros que contribuyeron a dotar de personalidad a su particular visión del death metal, en la que tienen cabida instrumentos acústicos e influencias progresivas.

"Creo que es ridículo intentar asociar un género a nuestra música; estamos construyendo nuestro sonido gradualmente, hasta el punto de que podemos hacer cualquier cosa que queramos. Los fans que quiero tener son los que están interesados en la música, realmente no me importa qué estilo específico prefieren", asegura su cantante, Mikael Akerfeldt. "No hay otra banda como nosotros en el planeta", ha manifestado Akerfeldt, quien reconoce la influencia de Morbid Angel, Pink Floyd, King Crimson, Leonard Cohen y Nick Drake.

Mientras, la sala Azkena de Bilbao presenta mañana (20.30; 18 euros) la actuación de Danielson, artista de Nueva Jersey cuyo pop singular, alejado de patrones comerciales, será precedido en escena por Jeffrey Lewis, dúo neoyorquino de folk pop.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_