_
_
_
_

Vilagarcía en vilo ante la llegada de un nuevo temporal de lluvias

El centro de Vilagarcía volvió a anegarse anoche, mientras la población permanecía en vilo ante la llegada de una nueva borrasca que, según las previsiones, arreciaría de madrugada. Los comerciantes pasaron el día tapiando sus establecimientos, y la Xunta envió refuerzos de otros cuatro municipios en apoyo de los equipos de protección civil del municipio. La patronal de Arousa ya calcula en al menos 70 millones de euros las pérdidas ocasionadas por las inundaciones de los últimos días.

Cuando Vilagarcía todavía se recupera de las catastróficas inundaciones del pasado lunes, a media tarde de ayer se encendieron de nuevo las alarmas. Una fuerte tromba de agua cayó sobre la ciudad, provocando las primeras inundaciones y cortes en los accesos al centro, como en la calle Rey Daviña, la más conflictiva por encontrarse sobre una antigua marisma. Una hora después, el temporal de lluvia dio una tregua, dejando tiempo a numerosos operarios de Protección Civil y Policía Local a achicar algunos tramos de las calzadas donde el agua cubría ya las aceras.

En otras zonas como la Avenida de Rosalía de Castro o Doctor Tourón se produjeron avalanchas de agua. Las llamadas de los vecinos demandando la presencia de Protección Civil colapsaron la centralita telefónica de la Policía Local. Sin embargo, la avenida que atraviesa el río Con, que en la última riada resultó gravemente afectada por su desbordamiento, permanecía tranquila y en constante vigilancia por patrullas policiales. En ese zona se desplomó un muro de contención durante el día.

Coches averiados

Mientras la tromba de agua descargaba, en muchos garajes continuaban achicando agua y las grúas retiraban coches averiados.Cientos de vehículos están aún atrapados en los garajes por las inundaciones de los pasados días. El sector comercial, que prácticamente continúa paralizado, tomó todo tipo de precauciones para proteger los locales. La hora más crítica de este nuevo frente estaba prevista para después de la una de la madrugada, con la llegada de la pleamar, una coincidencia que ha resultado fatal para los municipios de la comarca de Arousa, principalmente Vilagarcía.

Entre 70 y 80 millones de euros se cifran las primeras estimaciones de las pérdidas que han dejado las inundaciones del pasado lunes en los municipios de la provincia de Pontevedra. Los datos fueron adelantados ayer tras la reunión que mantuvieron representantes de la Confederación de Empresarios de Pontevedra, Cámara de Comercio de Vilagarcía y Federación de Empresarios de la Comarca de Arousa (FECA). Quedan sin evaluar los graves daños ocasionados por la riada en el sector agrícola, principalmente de O Salnés. Caixa Galicia anunció una línea de préstamos y subvenciones anticipadas para los afectados por valor de 10 millones.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_