Emilio Soler sustituye a Alcaraz en la Sede de la Universidad de Alicante
El Feminario recibe este año el Premio Maissonave por su lucha por la "igualdad"
El historiador Emilio Soler sustituirá este mes de diciembre a Manuel Alcaraz como director de la Sede de la Universidad de Alicante en el centro de la ciudad, que, tras cinco años en el cargo a petición propia, solicitó por cuestiones personales ser sustituido después de la celebración del Día de la Constitución. Por otro lado, el Consejo de Gobierno por unanimidad aprobó ayer la concesión del Premio Maissonave al Feminario por su lucha por la igualdad.
Emilio Soler (Barcelona, 1942) es autor de más de una docena de libros, como gestor cultural cuenta con una amplia experiencia, en los gobiernos socialistas de Joan Lerma, etapa en la que fue director general de Cultura y Promoción Cultural, también fue director del programa Música 92, y diputado autonómico en tres legislaturas consecutivas. También asumió la dirección del Centro de Desarrollo Turístico, y de la Fundación Largo Caballero, y en el campus también estuvo al frente de la Universidad Permanente, para personas mayores.
Fuentes del equipo rectoral destacaron ayer su trayectoria como gestor cultural y su conocimiento de la ciudad de Alicante. Su nombramiento oficial lo anunciará personalmente el rector, Ignacio Jiménez Raneda, el próximo día 4 de diciembre durante el transcurso de los actos conmemorativos del Día de la Constitución. Fuentes de la Universidad anunciaron que "las características esenciales" de las actividades y programación de la Sede, ubicada en Ramón y Cajal, continuarán, aunque "evidentemente cada director aporta su impronta personal". En las próximas semanas se nombrará también al subdirector académico de la Sede, ya que la actual, la profesora Mar Esquembre, también cesa, y acaba de asumir la dirección del Centro de Estudios de la Mujer de la Universidad de Alicante.
Por otro lado, el Consejo de Gobierno aprobó ayer por unanimidad la concesión del Premio Maisonnave 2006 al colectivo del Feminario, por su defensa de los valores cívicos, de la educación y de la cultura, y en especial por su "defensa de los valores democráticos de igualdad de derechos entre hombres y mujeres".
