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Entrevista:POLÍTICA CIENTÍFICA | Conducta inapropiada de un investigador

Dimite en EE UU el nobel Tonegawa, laureado en España

E l pasado 14 de noviembre, Susumu Tonegawa, Premio Nobel de Medicina y Fisiología 1987, fue investido Doctor Honoris Causa en la Universidad de Alcalá de Henares, a la vez que Carlos Martinez, presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Para dos días después estaba prevista la entrega de la Medalla de Oro del CSIC a Tonegawa, pero el acto fue cancelado y la institución envió una nota indicando que el prestigioso científico había "tenido que abandonar España antes de lo previsto, por motivos personales". El mismo día 16, ya en EE UU, Tonegawa anunció su dimisión como director del Instituto Picower de Aprendizaje y Memoria, del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT). La controversia que le rodea se remonta a cinco meses antes.

En mayo pasado, el científico nacido en Japón, de 67 años, envió dos mensajes por correo electrónico a una joven y brillante investigadora de su mismo campo, Alla Karpova, a la que uno de los centros de neurociencias del MIT había ofrecido un puesto como científica. En esos mensajes, informa The Boston Globe, Tonegawa instaba tajantemente a Karpova a rechazar la oferta porque sus intereses de investigación se solapaban. "Lo siento mucho.... no me siento a gusto en absoluto teniéndola a usted aquí como colega", escribió. También advirtió a la joven que no tendría acceso a un animalario concreto de ratones.

En la comunidad científica del MIT, 11 investigadoras enviaron el 30 de junio una carta al rector de la institución, explicando la actuación de Tonegawa con Karpova y lamentando: "Hemos permitido que un catedrático con mucho poder y recursos financieros se comporte de modo incívico [...] y, posiblemente, con falta de ética hacia una científica joven con talento que merece ser bienvenida al MIT".

Karpova decidió finalmente rechazar la oferta y aceptó otra: ahora lidera un grupo de investigación en el Howard Hughes Medical Institute.

Un portavoz del CSIC declaró ayer a EL PAÍS que la concesión de la Medalla de Oro a Tonegawa fue aprobada por la Junta de Gobierno de la institución el 29 de junio, a propuesta de Martínez, recalcando que la primera carta de denuncia de la actuación de Tonegawa respecto a Karpova tiene fecha del día siguiente. "En aquel momento no se sabía nada de este tema", dijo. La entrega de la medalla ha sido aplazada.

"La Medalla de Oro del CSIC merece ser entregada a científicos no sólo de máximo prestigio, sino que cultiven el respeto a la profesión y a los derechos por los cuales seguimos luchando", afirma Alicia Durán, profesora de investigación del CSIC. Ella recalca que escribió a Martínez y a dos vicepresidentes del CSIC sobre la controversia y expresando su disconformidad con la distinción a Tonegawa "al menos dos semanas antes de que él llegara a Madrid". "No me contestaron", dice.

En su edición del pasado día 21, la revista The Scientist explicaba que la la dimisión de Tonegawa se producía "tras un informe de la universidad que critica sus actuaciones en relación a la oferta de trabajo que otro instituto del MIT hizo a una joven investigadora de su campo".

Dicho informe concluye que Tonegawa actuó "de modo inapropiado al indicar a Karpova que no tendría acceso el animalario de ratones", así como al expresar su preocupación por el solapamiento y competencia de sus respectivas investigaciones. La comisión echa parte de la culpa de la controversia a la competencia insana en el área de neurociencia del MIT y justifica, en parte, a Tonegawa porque fue excluido del proceso de selección de Karpova.

En cuanto a si ha habido o no discriminación de género, el informe niega haber encontrado indicios de dicha motivación en el Nobel respecto a la joven investigadora, "aunque el caso sí que tiene implicaciones de género", puntualiza. El comité no propone sanción.

Tonegawa dejará su cargo el 1 de enero. En su carta de dimisión señaló: "Así podré dedicar toda mi energía y atención a la investigación". El rector del MIT, Rafael Reif, emitió un comunicado agradeciéndole su labor científica y de dirección del Instituto Picower, sin mencionar ningún intento de hacerle reconsiderar su decisión.

"El neurocientífico de la Universidad de Stanford Ben Barres, que ha seguido de cerca la controversia, considera que la dimisión de Tonegawa es 'un importante paso adelante para que haya un entorno de mayor colaboración y apoyo en la comunidad de neurociencias del MIT", informa la revista Science.

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