Young: "En la editorial virtual quien manda es el escritor"

El canadiense Bob Young revolucionó el mercado del software en la década pasada con Red Hat, empresa dedicada a la distribución de su versión Linux. Ahora ha vuelto con otra idea, con la que también pretende dejar huella. Se trata de Lulu.com, una editorial virtual fundada en 2002. Lulu facilita a los escritores un viejo sueño, la autopublicación a bajo coste y sin cesión de derechos de autor.

Cualquiera puede depositar su libro en el archivo digital de Lulu, elegir el tipo de papel, ponerle precio y, a partir de ahí, esperar compradores. Lulu lo imprime y lo envía. Este mes ha abierto su sitio en España. Las impresiones se realizan en Sevilla con tecnología de Xerox. La publicación digital Silicon.com ha colocado a Bob Young en el número 18 del mundo entre los directivos más innovadores del sector de nuevas tecnologías. El año pasado era el número 49.

Pregunta. ¿Cómo surge la idea de Lulu?

Respuesta. Tiene que ver con mi idea de lo que es un emprendedor, alguien que quiere resolver un problema social desde la óptica del hombre de negocios. Me sucedió antes con el software de código abierto y, en el caso de Lulu, con las dificultades que encuentran muchas personas para publicar sus libros, debido al rechazo editorial. A veces porque el libro es realmente malo, pero en muchas otras porque consideran que está dirigido a un mercado de lectores reducido, que no compensa la inversión.

P. ¿Y con Lulu, sí?

R. En la era de Internet no debe de haber ningún problema para editar un libro, aunque su mercado potencial sea de un solo lector, como de hecho nos ha ocurrido con uno titulado 50 razones por las que debes casarte conmigo, que el autor escribió y editó para su novia. Por cierto, acabaron casándose.

P. ¿Internet cambia las reglas de la edición?

R. El negocio editorial en Internet, y en concreto en Lulu, se basa en disponer de muchos libros con tiradas cortas de cada uno, al contrario que el negocio tradicional de las editoriales, que buscan un catálogo más bien corto y tiradas largas o al menos rentables, que en España pueden ser de unos 5.000 ejemplares anuales vendidos y en EE UU de unos 20.000. Sin embargo, hay libros muy específicos hechos para una demanda limitada. Y ahí es donde entra Lulu, con la idea de darle el mando a los autores a través de la tecnología de impresión bajo demanda.

P. Darles el mando, pero ¿también más rentabilidad?

R. En efecto. Antes de que existiera Lulu escribí el libro Red Hat, Bajo el Radar. Se vendieron 20.000 ejemplares en EE UU por el sistema tradicional, a 25 dólares cada uno. Así que la suma total era de medio millón de dólares. Gané 2.000 dólares, y 5.000 copias se quedaron en un almacén. Con Lulu trocamos los porcentajes de ganancias. El autor se puede llevar hasta el 80% del precio de libro vendido, descontados costes de impresión y envío. Nosotros nos quedamos una pequeña comisión. En la industria tradicional, en cambio, el autor se suele llevar sólo el 10%. El propio escritor fija el precio de su obra, y si ésta ha de estar visible en el sitio web en su totalidad o en parte.

P. ¿Cuántos libros venden?

R. Unos 60.000 ejemplares mensuales y crecemos el 10% cada mes. En nuestro catálogo hemos superado los 50.000 autores, un centenar de ellos en español. La editorial es rentable desde 2005, tres años después de su lanzamiento. En 2004 el volumen de negocio fue de un millón de dólares, en 2005 de 5 y en 2006 llegará a 16 millones.

P. ¿La web también permite la corrección?

R. El autor puede actualizarlo o modificarlo en cualquier momento. Esto es algo muy útil sobre todo para los libros técnicos, que necesitan incorporar las últimas novedades para no quedarse obsoletos, pero también sirve para corregir errores descubiertos por el lector.

P. ¿La lengua dejará de ser un obstáculo?

R. Estoy convencido de que en los próximos 12 meses habrá más títulos en euskera en Lulu que todos los que se publiquen por el modo tradicional.

LULU ESPAÑA: www.lulu.com/es