184 días con un agujero de 5.000 millones
Los productos de las empresas filatélicas Fórum y Afinsa dejaron de ser un negocio redondo el pasado 9 de mayo para los propietarios de las compañías, y para sus clientes.
Hoy hace seis meses (184 días) que se produjo la intervención judicial de las dos compañías por una presunta estafa masiva perpetrada gracias a una administración desleal, falsedad documental y presunto blanqueo de capitales, según la investigación judicial. El agujero estimado por los administradores judiciales podría rondar los 5.000 millones de euros. Algo más de 1.700 en el caso de Afinsa, y entre 2.700 y 3.400 para Fórum.
Durante estos seis meses, los afectados se han hartado de enviar copias de sus contratos aquí y allá; y los juzgados y los administradores, de recibirlos y clasificarlos. Y en medio, las asociaciones de consumidores, que en muchos casos no aciertan a vislumbrar el siguiente paso a dar tras pasarse meses atendiendo el papeleo de las miles de personas que han recurrido a ellos.
Aún no se sabe ni cuánto ni cuándo ni cómo volverán a poder disfrutar de su capital. Mientras, en los juzgados 1 y 5 de la Audiencia Nacional se escudriñan los entresijos de ambas sociedades con la vista puesta en un juicio que podría demorarse una década. Las asociaciones no confían en que los afectados recuperen mucho de lo invertido.
Más rápido será el camino de la vía concursal; los administradores encargados de valorar los activos y pasivos de las empresas, incluidos los sellos que están siendo catalogados por expertos, y de hacer el reparto de los bienes, podrían concluir su misión en unos tres años. En enero y febrero, respectivamente, se dará a conocer la radiografía exacta de las dos empresas, y tras un periodo de impugnaciones, se procederá al pago a los acreedores. Este punto plantea el inconveniente de que, teniendo en cuenta el agujero de las compañías y que hay ciertos acreedores que tienen preferencia, como es el caso de Hacienda o la Seguridad Social, lo que llegue a los afectados puede significar sólo una pequeña parte de lo invertido.
La Unión de Consumidores de España (UCE), teniendo en cuenta esta contingencia, ha presentado una querella, pidiendo la nulidad de los contratos y la devolución íntegra de las inversiones, "que de prosperar supondría que los afectados tendrían preferencia sobre cualquier otro acreedor a la hora del reparto", subraya José María Roncero, presidente de esa asociación de consumidores.
Moderado optimismo
Francisca Sauquillo, que preside el Consejo de Consumidores y Usuarios, ignora si los clientes de las filatélicas recuperarán todo o una parte de lo invertido. "Si las querellas que se han presentado consideran que es una estafa y se anulan los contratos lograrán ser acreedores preferentes y recuperar una mayor cantidad. Yo soy moderadamente optimista", señala.
Sauquillo mantiene que "la responsabilidad es de una empresa que ha estafado a sus clientes" y que, por tanto, "no se puede hacer responsable al Estado" para que apruebe un fondo de ayuda a los perjudicados. "Lo que sí queremos reclamar, y tendremos una reunión con el Ministerio de Sanidad y Consumo sobre este tema, es un fondo de adelanto, porque hay casos de gente muy necesitada, y se les podría adelantar un dinero hasta que recuperen todo o parte del capital". Los afectados saldrán a manifestarse el próximo día 11 en 15 capitales, y el 2 de diciembre está decidida una gran marcha en Madrid.
Un dato curioso: casi un 20% de los clientes de Fórum no han reclamado la deuda con la compañía, y se espera que en Afinsa, cuando se cierre el plazo el día 15 de noviembre, ocurra lo mismo. Las asociaciones no lo achacan a despistados, sino a personas que utilizaban esas compañías para invertir su dinero negro.
La opción de hacer al Estado responsable civil es una opción que no convence mucho a los defensores de los estafados, al menos de momento.
