"Me ha gustado mucho"

No todo fueron malas noticias para el Madrid. Por fin, Ronaldo y Fabio Capello han coincidido en los asuntos concernientes a la anatomía del cuerpo humano. Ayer, el entrenador aseguró que quitó a Ronaldo porque tenía calambres -producto de la falta de rodaje- y el delantero lo confirmó así: "En el minuto 20 de la segunda parte tuve dos calambres que me impedían cambiar de ritmo. Me entiendo muy bien con Van Nistelrooy, pero tuve mala suerte porque, cuando coincidimos, me quedé sin gemelos. Terminé acabado".

A diferencia de lo que ocurrió el martes pasado, cuando ambos personajes se desencontraron al valorar la influencia de una tortícolis, ayer, tras caer derrotados ante el Celta, se reestableció la armonía emocional entre Capello y Ronaldo. La jornada fue buena en el apartado espiritual, pero mala en el aritmético: el Madrid perdió tres puntos. Además, su juego no convenció a sus hinchas. El Bernabéu osciló entre la incredulidad y la crispación. El público duda. El entrenador, no. Capello no sólo se mostró satisfecho, sino que dijo que por primera vez daba el aprobado a sus jugadores: "Hemos tenido muchas oportunidades de marcar, pero no hemos hecho goles. Hemos jugado un muy buen partido. Me ha gustado mucho el equipo. Por primera vez, me ha gustado. Lo que pasa es que hemos hecho dos regalos y nos han castigado".

"Tuve calambres y me quedé sin gemelos. Terminé acabado", reconce Ronaldo

El único reproche del técnico italiano fue el que pareció dirigir a Emerson y Reyes, los jugadores que, con sus pérdidas del balón, propiciaron los contragolpes decisivos del Celta. Los del equipo gallego no lo vieron de la misma manera. Lequi, el central argentino, observó que el Madrid no tuvo tantas ocasiones como aseguró Capello: "Ojalá jugáramos con esta intensidad contra equipos chicos también. No recuerdo haberme sentido tan cómodo como defensa central. Los delanteros del Madrid llegaron siempre filtrados.. No nos remataron bien. Sólo dispusieron de ocasiones con tiros desde fuera del área".

Capello insistió con su versión de los hechos con un apunte trascendental. "Me ha gustado más la segunda parte. Quité a Diarra porque tenía una tarjeta amarilla y tenía miedo de que nos quedáramos con diez".

Cabe interpretar estas palabras en el sentido de que a Capello le gustó más el Madrid con Guti y Emerson en el medio centro que con Diarra y Emerson. También se puede concluir que prefiere a Ronaldo junto a Van Nistelrooy antes que a Ronaldo solo en punta. Esto lo ratificó el propio entrenador. "Ronaldo ha tenido una oportunidad clarísima de marcar", declaró; "su pareja con Van Nistelrooy me ha gustado mucho. Los dos pueden jugar juntos desde el principio. Voy a seguir con ellos seguro".

Cuando habla en público, Capello siempre parece sumido en una especie de soliloquio. Las evidencias externas no lo inmutan. Ni ayer, ni contra el Steaua, ni contra el Nàstic apreció miserias en su equipo. "Es una derrota inmerecida", concluyó; "hemos hecho dos regalos y hemos tenido seis o siete ocasiones, quizá algún penalti, pero sólo lo es si el árbitro lo pita".

Como en otras ocasiones, Capello llegó a decir que el árbitro debió concederles un penalti. Lo mismo opinaron los jugadores del Celta sobre una posible falta de Casillas a Nené. Finalmente, el italiano dijo que, ya que había cambiado el sistema y había pasado de jugar con un 4-2-3-1 a hacerlo con un 4-2-2-2, el desajuste era el causante de la derrota. "Cuando uno cambia, hay que esperar un poco", explicó.

Al salir del vestuario, Ronaldo dijo sentirse dolido por la derrota. "No estoy feliz para nada", negó cuando le preguntaron por las emociones que le inspiró la titularidad; "estoy contento porque la gente me quiere mucho. Espero recompensar su cariño con goles. Necesito muchos goles".