Los investigadores hallan restos de gasóleo junto al coche incendiado de Granados

Los agentes de Policía Judicial que se encargan de la investigación del incendio, el pasado 22 de octubre, del coche del consejero de Presidencia y secretario general del PP en Madrid, Francisco Granados, han hallado restos de un combustible (supuestamente gasóleo) junto al vehículo. Así lo han remitido en un informe que han presentado a principios de esta semana ante el juzgado de Valdemoro que instruye el caso, según fuentes del instituto armado. El vehículo, un Mini Cooper descapotable, estaba a nombre de una empresa constructora de Valdemoro.

El incendio se produjo la madrugada del pasado domingo 22 de octubre. La fuerte humareda que se produjo en el inmueble donde vive el consejero, en la calle de la Guardia Civil, en Valdemoro, obligó a desalojar a unas 450 personas que estaban durmiendo en esos momentos en sus casas. Los bomberos tuvieron serias dificultades para extinguir el fuego, ya que en algunos momentos se alcanzaron temperaturas de hasta 1.300 grados. El denso humo se coló por las bajantes y provocó destrozos en gran parte de las viviendas.

Las primeras investigaciones de la Guardia Civil descartaron que hubiera alguna sustancia aceleradora entre los restos de los seis coches que quedaron calcinados. Sin embargo, un análisis posterior de la zona del siniestro permitió descubrir que había alguna sustancia junto al coche de Granados, un Mini Cooper descapotable. Las muestras fueron remitidas al Laboratorio de Criminalística de la Dirección General de la Guardia Civil. De su estudio se ha concluido que se trata de un combustible procedente del petróleo (previsiblemente gasóleo o gasolina), según publicó ayer El Mundo. Este acelerador hizo que las llamas se propagaran con mayor rapidez.

El consejero Granados señaló ayer por la tarde a EL PAÍS que desconocía el contenido exacto del informe remitido por la Policía Judicial de la Guardia Civil al juzgado de Valdemoro: "Desde que ocurrió el incendio nadie me ha dado noticias de cómo iban las investigaciones".

El secretario general del PP-Madrid descartó en un principio que el incendio de su vehículo fuera una venganza por las declaraciones que hizo Granados sobre el urbanismo de Ciempozuelos. En su opinión, se trata de alguna gamberrada propia de alguien de Valdemoro que, al saber donde vive, se dedicó a quemarle el coche. Lo que queda del vehículo, que quedó convertido en un amasijo de hierros calcinados, está todavía bajo custodia de la Guardia Civil.

Granados también destacó que los atacantes debían de conocer el garaje donde él aparca el coche, ya que tiene una forma extraña (como una especie de U). Además, es estrecho y tiene bastantes recovecos que lo hacen más problemático a la hora de entrar o salir del mismo. Eso hace suponer que los que le quemaron el coche ya habían entrado unos días antes al aparcamiento subterráneo. "Aparcan muchos coches ahí, más de un centenar, y es fácil que los atacantes se hicieran con una llave para entrar o salir. O, si no lo hicieron así, lo mismo esperaron a que entrara alguien y se colaron. Seguro que esto tiene más que ver con que sea político o del PP que un tema urbanístico", concluyó el consejero de Presidencia.

Fuentes de la Guardia Civil señalaron ayer que la publicidad y las continuas declaraciones de políticos que se están dando tras el incendio del coche del consejero están dificultando las investigaciones.