Una de vampiros en Chiclana

La lluvia de esta semana ha impedido a Abel Hidalgo rodar una de las escenas más espectaculares de su primera película. Con 18 años recién cumplidos ya conoce los gajes del oficio. Los problemas meteorológicos o las dificultades técnicas no le han mermado la ilusión para culminar su ópera prima, Rol, una historia de suspense y tensión cargada de efectos especiales que está dirigiendo con los conocimientos adquiridos de su afición al cine, las lecturas sobre el séptimo arte y su experimentación con la informática. El presupuesto inicial ronda los 500 euros y espera estrenar a principios del próximo año.

Rol se ha rodado en las calles de Chiclana (Cádiz), ciudad natal del director, donde con 16 años se compró una cámara Minidv costeada con el trabajo conseguido en los hoteles de la zona. "Siempre me ha gustado el cine", reconoce. Con unos amigos jugó el verano pasado a una partida de rol. El juego se llamaba La mascarada. "Nos gustó y pensé que podía rodar un corto basándome en la misma idea", recuerda Hidalgo. Fue el germen de su primera película. Lo que iba a ser un corto se transformó en un largometraje, que ha ido creciendo en intenciones a medida que ha ido avanzando el proyecto.

Será el único alumno que podrá presumir de tener su primer largo antes de acabar el curso

Lo primero que se grabaron fueron vistosos amaneceres en Chiclana. Aquello fue hace un año. Todavía, y a pesar de la cercanía del estreno, se siguen rodando. La lluvia ha impedido escenificar el tiroteo frente al Palacio de Justicia. También ha dificultado las pruebas que se están realizando con bomberos para representar un enorme fuego en el solar de La Longuera. Son escenas pendientes pero otras ya están listas para ser montadas. Entre ellas, persecuciones de coches, peleas de bandas o explosiones. "Queremos demostrar que en España se puede hacer algo interesante con los efectos visuales digitales", afirma.

Rol es una película de vampiros. Es una historia de ficción dentro de otra. Cinco jóvenes se preparan para jugar una partida y el espectador asistirá a ese doble papel. "El rol, a pesar de su mala imagen, es un gran teatro, una dramaturgia que yo reivindico". Su sueño es consolidarse como director y por eso quiere seguir formándose. Acaba de entrar en la Escuela de Cine de Puerto Real. Será el único alumno que podrá presumir de tener su primer largometraje antes de acabar el curso.

En su primera vez Abel Hidalgo no ha escatimado esfuerzos. Incluso ha conseguido que el actor Antonio Resines haga una pequeña aparición. La película se promociona ya en Internet y ha generado expectación en Chiclana, donde se estrenará en el Teatro Moderno. "La distribución de un largo es más difícil que la de un corto pero será mi carta de presentación", cuenta.

Una de las escenas que circula en la red es la explosión de la ermita de Santa Ana, que sacude con intensidad el trailer. Esa imagen finalmente se caerá del montaje final pero sigue promocionando la película en Internet. Porque, aunque sea su primera película, Abel Hidalgo ya se conoce muchos trucos del cine.