Ventura Pons ve "historias brutales" para llevar al cine en las letras valencianas

El cineasta catalán Ventura Pons afirmó ayer en Valencia que "en la literatura contemporánea valenciana, catalana e inglesa hay una cantidad brutal de historias que contar en el cine". El realizador, que se estrenó en el cine con Ocaña, retrato intermitente, realizó estas declaraciones en la SGAE con motivo del homenaje que le rinde el festival de cine en valenciano Inquiet, que se celebra en Picassent y Valencia.

Ventura Pons sabe de lo que habla. No sólo es conocedor de la literatura actual, sino que ha adaptado varias obras de Josep María Benet i Jornet, Quim Monzó o Ferran Torrent. "Mis relaciones con la literatura son largas", recordó el realizador, que acaba de finalizar la película La vida abismal, basada en la novela finalista del Planeta de Ferran Torrent. Sobre este filme, que se estrenará a finales de enero, dijo estar "muy contento" con el resultado final. Indicó que los distribuidores "cuidan mucho" el pase de esta cinta porque están "muy satisfechos" de ella al igual que todo el equipo de rodaje y el propio autor. Con todo, Pons señaló que lo más importante "no es que a Ferran le haya gustado porque una película es otra cosa que un libro, sino que tenga consistencia".

Pons comentó que hace mucho tiempo que tenía ganas de adaptar una obra del autor de Sedaví y que al leer este texto estaba escuchando "ruédame, ruédame" porque narra una historia "muy interesante" sobre "la amistad, la pasión por la vida y el límite de las cosas". Además, el libro ambientado en los años setenta le ha permitido "darse cuenta de lo que ha cambiado España, entonces sometida a la dictadura, la falta de libertades, la presión social y el papel de la iglesia".

El director de Amic / amat, Amor idiota o Anita no perd el tren, del que la Filmoteca y el IVAM exhiben un completo ciclo hasta el 16 de noviembre, repasó la actualidad y señaló que "Europa occidental vive en una burbuja de bienestar", por lo que sus películas "no son una muestra del compromiso social clásico, porque reflejan lo que se ve, opulencia y libertades".

El realizador precisó que "son los que compañeros que viven en los lugares donde verdaderamente hay dificultades y opresión los que tienen que hacer películas abiertamente comprometidas, porque conocen la situación".

Productor, guionista y realizador, Ventura Pons, apuntó que a través de sus propuestas, el público puede ver su "sentido de la vida", su independencia y su forma de hacer las cosas, "que siempre ha sido un poco contracorriente".