Maragall mantiene que el tripartito no ha cometido "errores graves" y respalda a Montilla
Finalmente, Pasqual Maragall se ha lanzado a hacer campaña electoral. Después de compartir mantel con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el candidato del Partit dels Socialistes (PSC), José Montilla, en un acto con empresarios el pasado martes, Maragall hizo ayer su primer acto de campaña en solitario. Fue en Tàrrega (Urgell) y arropado por casi 200 simpatizantes del PSC a los que lanzó tres grandes mensajes. El primero, que el actual Gobierno catalán ha hecho las cosas bien -"sin ningún error grave"-. El segundo: "A mí no me han echado". Y el tercero. "Me fío de Montilla, es el hombre que debe llevar adelante los proyectos que hemos iniciado nosotros".
Maragall fue el centro de atención de un acto en apoyo al candidato del PSC por Lleida, Joaquim Llena, que no constaba en la agenda de actos que todos los días el PSC envía a los periodistas que siguen a Montilla. Con todo, el presidente de la Generalitat se propuso que nadie del auditorio se marchara con la sensación de que ha sido apeado de la presidencia de la Generalitat por quien aspira a sucederle desde su propio partido. Sobre todo, porque fueron las agrupaciones locales de Tàrrega, Cervera y otras localidades de Lleida las que durante la campaña del referéndum estatutario colgaron más carteles en los mítines con el mensaje "Maragall quédate".
Por este motivo, Maragall centró su intervención de ayer en defender la obra de Gobierno realizada en los últimos tres años sin ningún tipo de fisura. De acuerdo con su teoría, si se ha hecho bien, no hay motivos para que alguien pueda haber decidido echar al presidente. Así, fue tajante al decir: "No os preocupéis por los errores, porque no los ha habido, al menos ningún error grave". Alejado el fantasma del voto de castigo al PSC, el presidente de la Generalitat se refirió largo y tendido a lo que ha hecho su Gobierno.
Habló de una refundación del concepto de educación pública y de las mejoras en la sanidad y los servicios sociales. "Nosotros hemos puesto la base, ahora hay que desarrollarlo". Fue en este punto cuando quiso borrar cualquier sombra de duda sobre su apoyo al candidato del PSC, José Montilla. "Me fío de él", dijo después de nombrar a otros dirigentes del PSC, entre ellos Manuela de Madre y el candidato por Lleida, Quim Llena, presentes en la sala.
Así, recordó que dirigentes del PSC del entorno más próximo a Montilla, como Miquel Iceta o la propia Manuela de Madre, defendieron en su día en un Congreso del PSOE la idea de que Cataluña es una nación. "Desde entonces en el PSOE ya nadie lo duda", aseguró el presidente. Maragall también invitó al auditorio a no juzgar a Montilla por su origen andaluz. "En Estados Unidos un afroamericano puede ser el próximo presidente, Cataluña también debe dar lecciones en este sentido", aseguró.
Otro mensaje de apoyo inequívoco al primer secretario del PSC lo lanzó Maragall por la mañana en Lleida. Aseguró de Montilla: "Es el mejor candidato que podríamos tener", aunque "tiene una manera de decir las cosas un poco escueta".
Tras estos mensajes de apoyo a Montilla y a la dirección del PSC, Maragall también quiso dejar claro que no opta a la reelección porque así lo ha querido. "No me han echado, yo me he ido, y lo tenía decidido desde hace mucho tiempo, lo que pasa es que no podía decirlo porque si dices que te irás ya nadie te hace caso".
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