La apuesta más arriesgada de Chaves

Durante cinco años, con mayor o menor intensidad, las propuestas políticas de los partidos han girado sobre la reforma del Estatuto de Autonomía de Andalucía. El primer listón lo colocó el presidente de la Junta, Manuel Chaves, en junio de 2001, cuando en el debate del estado de la comunidad anuncia, como mera posibilidad, la reforma, su apuesta política más arriesgada que al día hoy va a llegar a buen puerto.

Varios son los momentos por los que ha pasado en el proceso, que concluirá cuando los andaluces voten en referéndum el nuevo texto el 25 de febrero de 2007.

En las elecciones autonómicas de marzo de 2004 todos los partidos, salvo el PP, llevan en sus programas electorales la reforma estatutaria. Ha sido en esta legislatura cuando se ha impulsado. El 24 de septiembre de 2004 la ponencia de reforma del Parlamento andaluz -integrada por 11 diputados- comienza sus trabajos con una declaración conjunta en la que se subraya su vocación de consenso.

Entre octubre de 2004 y marzo de 2005 se producen las comparecencias de cerca de un centenar de agentes sociales, económicos y referentes políticos que van dejando sus aportaciones.

En abril de 2005, los diferentes grupos registran sus propuestas. Estos documentos son muy indicativos del grado de compromiso de los partidos con la tarea a la que se han comprometido. Los documentos más precisos son los del PSOE e Izquierda Unida; los menos, los del PP y PA.

Desde esa fecha hasta enero de 2006 los grupos elaboran informes en los que separan a un lado las materias en las que están de acuerdo y al otro, las discrepancias. El ritmo de estos trabajos lo marca, en buena medida, la marcha del Estatuto de Cataluña. Cuando se avanza en el Parlamento catalán, lo hace el de Andalucía y cuando se bloquea la negociación en Barcelona y ralentiza en Sevilla.

El 3 de febrero de 2006, PSOE e IU registran la proposición de reforma, cuya toma en consideración por el pleno del Parlamento se celebra el 16 de ese mes. El texto sale adelante por 64 votos a favor (PSOE e IU) y 42 abstenciones (PP y PA).

A partir de entonces se producen nuevas comparecencias. Es en este trámite (6 y 7 de marzo) donde Manuel Clavero Arévalo propone aludir a la "realidad nacional" de Andalucía en el Preámbulo, que asume el PSOE.

El 20 de abril de 2006, la Comisión de Desarrollo Estatutario aprueba el dictamen. PSOE e Izquierda Unida votan a favor del texto articulado. La propuesta tiene 246 artículos frente a los 77 del Estatuto vigente, 169 más que la Constitución española. PP y PA, desde las antípodas políticas, rechazan todos y cada uno de los 11 títulos de la proposición. Esta mismo resultado se da en el pleno del 2 de mayo de 2006, en el que la propuesta supera por un solo voto los tres quintos necesarios: 67 síes y 41 noes.

El 23 de mayo el Congreso aprueba la toma en consideración de la reforma, con el voto en contra del PP. La ponencia mixta Congreso-Parlamento andaluz comienza sus trabajos el 20 de septiembre. En este trámite se modifican 120 de 246 artículos.

El dictamen lo aprueba la Comisión Constitucional el pasado 24 de octubre por unanimidad. En la delegación del Parlamento andaluz sólo hubo dos votos en contra, los del PA.