A Sony se le agotan las pilas

Malas noticias en Sony. El conglomerado japonés, que es el segundo fabricante mundial de artículos electrónicos para uso doméstico, anunció el jueves que ha recortado en un 38% su previsión de beneficios netos globales para el actual ejercicio fiscal japonés, que acaba el 31 de marzo de 2007, en el que cree que ganará 80.000 millones de yenes (536 millones de euros) frente a los 130.000 millones de yenes (872 millones de euros) que había estimado desde julio hasta ahora.

La compañía utilizó un comunicado para contar las noticias a sus accionistas. En la nota también reconoce que la revisión de los resultados se debe a "los gastos derivados" de la retirada y reemplazo de forma gratuita de baterías defectuosas de ión de litio de las computadoras portátiles Vaio en Japón y en China. Es la primera vez que este problema afecta a sus propios ordenadores.

Ya se han recogido un total de 8 millones de componentes defectuosos, cifra que podría alcanzar los 9,6 millones

Sony es el segundo fabricante del mundo de baterías de ión de litio tras la también japonesa Sanyo Electric. Según informó en la nota, destinaría 51.000 millones de yenes (342 millones de euros) para sufragar los costes por esa retirada, por la que ya se han recogido un total de 8 millones de esos componentes defectuosos, cifra que podría alcanzar los 9,6 millones, según su presidente financiero, Nobuyuki Oneda.

A esta situación han contribuido también, según los analistas, los cambios en el mercado de divisas y la actuación de las divisiones de electrónica de consumo y entretenimiento de este gigante japonés.

Sony es el mayor fabricante del mundo de juegos electrónicos. La compañía presidida por Sir Howard Stringer ha reconocido que su facturación también se verá afectada por haber aplazado hasta el próximo marzo -tal y como adelantó el pasado septiembre- el lanzamiento en Europa de su consola de próxima generación, el precio de su videoconsola PlayStation3 (PS3). La razón aducida es la existencia de dificultades a la hora de producir un componente con el formato de la nueva generación Blue Ray Laser, fundamental para la lectura del disco de alta definición.

Consola más barata

Todo esto ocurre, además, cuando Sony ha recortado el precio de su nueva consola en 10.000 yenes (67 euros), para que sea competitiva respecto a las más económicas de Nintendo y Microsoft. Se preveía que el precio del dispositivo fuera el equivalente a 317 euros en Japón y 399 dólares en Estados Unidos.

Respecto a la retirada de las baterías de los ordenadores Vaio, es la segunda ocasión en los dos últimos meses en que esas unidades producidas por Sony tienen que ser cambiadas y sustituidas. El pasado agosto, los fabricantes de computadoras socios del gigante japonés de la electrónica, Dell, Apple, Lenovo, IBM, Hitachi, Fujitsu, Sharp y Toshiba, tuvieron que hacer lo mismo con casi ocho millones de unidades de ese componente defectuoso ante el temor de que sufrieran recalentamiento, originaran un cortocircuito y se incendiaran. De hecho, uno de estos incidentes se produjo en un ordenador portátil en el aeropuerto estadounidense de Los Ángeles este año.

El gigante japonés de la electrónica, Sony, ha indicado que ha invertido entre 20.000 y 30.000 millones de yenes (de 135 a unos 202 millones de euros) en la operación de devolución de las baterías, situación que podría agravarse si las compañías informáticas que han empleado las baterías defectuosas deciden reclamar una indemnización por los daños de imagen y costes, como el de la caída de las ventas, que les supone su sustitución. Toshiba dijo el lunes, de hecho, que estaba estudiando este extremo.