El Congreso aprueba iniciar los trámites para traspasar a la Generalitat Cercanías y regionales

El pleno del Congreso de los Diputados aprobó ayer una moción presentada por Joan Herrera (ICV) para que se inicien, antes de acabar este año, los trámites necesarios para traspasar a la Generalitat la gestión de los trenes regionales y de Cercanías. La moción, que contó con el voto afirmativo de todos los grupos y la abstención de ERC, se basa en el artículo 169 del nuevo Estatuto, que establece que la gestión de los servicios ferroviarios interiores se haga desde el Gobierno catalán. La sorpresa no fue tanto la postura de ERC como el voto favorable del Partido Popular.

La moción aprobada es la consecuencia de una interpelación hecha por el propio Herrera la pasada semana, pero anteayer daba la impresión de quedar en una mera declaración de intenciones porque no contaba con el apoyo de los socialistas. Sin embargo, las negociaciones fructificaron al filo de la medianoche y ambas formaciones llegaron a un acuerdo al respecto.

El segundo punto de la moción establece que "antes del 31 de diciembre de 2006" deben "iniciarse los contactos y hacer que se pongan en marcha los instrumentos necesarios para dar cumplimiento al artículo 169 del Estatuto de Autonomía de Cataluña".

La medida supone poner en funcionamiento las comisiones de traspasos correspondientes, explicó Joan Herrera, visiblemente satisfecho por el resultado de la votación.

Herrera presentó la moción tras una interpelación al Gobierno por el mal funcionamiento de los servicios de Cercanías en Cataluña en el último mes. Lo hizo de modo casi coincidente con el senador de Convergència i Unió (CiU) Pere Macias, cuya interpelación se vio anteayer en el Senado y que llevará también a una moción que se votará dentro de unos días, aunque Macias ha preferido insistir en las inversiones necesarias para paliar el problema.

Las inversiones también figuran en la moción de Herrera y se recogen en el primero de los puntos aprobados. Propone "impulsar el cumplimiento del acuerdo alcanzado entre el Ministerio de Fomento y la Generalitat de Cataluña el pasado 27 de septiembre de 2006, para que la ejecución de proyectos y actuaciones en materia de ferrocarril convencional en Cataluña, en lo que concierne a la inversión del Estado, por más de 3.563 millones de euros, se articule mediante la adecuada dotación presupuestaria de las actuaciones previstas en el mismo".

La sorpresa de Herrera se produjo cuando los diputados del Partido Popular, generalmente reacios a cualquier tipo de medida descentralizadora, votaron a favor de la moción de Herrera. En el otro lado, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) se desmarcó de la medida y decidió abstenerse por considerarla "humo".

La intervención de ERC corrió a cargo del diputado Andreu Domingo, quien reconoció que Herrera había hecho un diagnóstico correcto cuando hablaba de la falta de inversiones en los trenes convencionales en Cataluña, pero discrepó sobre la oportunidad de la moción porque, dijo, no tendrá consecuencias por la falta de voluntad del actual Gobierno.

Domingo aseguró que de los 31 millones de euros presupuestos por la Dirección General de Ferrocarriles para el tren convencional en Cataluña el gasto hecho era inferior al 10% de esa cantidad, y ello pese a que hay una gran obra en marcha, que es el tramo entre Tarragona y Vandellòs. La falta de inversión, dijo, "es la triste realidad de las Cercanías y del ferrocarril convencional en Cataluña".

Joan Herrera, en cambio, sostuvo que las medidas e inversiones aprobadas servirán para dar un impulso al ferrocarril convencional, tanto en Cercanías como en los trenes regionales.