Las comunidades del PP se niegan a acoger a menores inmigrantes llegados de Canarias

El Gobierno iniciará hoy los traslados de inmigrantes menores de edad que se encuentran ahora en centros de acogida canarios. La masiva llegada de embarcaciones con inmigrantes del pasado mes de agosto ha desbordado los centros de esa comunidad autónoma. El reparto será desigual por toda España porque las comunidades gobernadas por el PP se han negado a acoger a los menores. Todas las comunidades, menos la de Murcia, que acogería 10 menores, aunque aún no ha fijado fecha para aceptarlos, según ha comunicado al Gobierno.

Los menores tienen entre 15 y 17 años, y la mayoría procede de poblados del interior o de arrabales de pescadores de la costa de Senegal. Poseen estudios primarios y suelen hablar francés. Muchos han llegado con números de teléfono de familiares instalados en España. Canarias acoge a 500 menores de estas características, pero sus centros no dan abasto.

Hace dos semanas, el Gobierno reunió a todas las comunidades autónomas para trazar un plan de traslados y acogida en la Península de algo menos de la mitad de estos menores. Ya entonces, los consejeros de comunidades gobernadas por el PP expresaron sus trabas a la operación.

El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales explicó ayer en el Congreso que el programa de traslados, con garantía de los derechos de los menores, arrancará hoy mismo. "Ya tenemos un primer tramo del programa total comprometido con las comunidades autónomas para 150 menores".

Caldera respondía a Paulino Rivero, diputado de Coalición Canaria, el partido que gobierna en esa comunidad, que manifestó su preocupación ante la situación de los menores en centros que no tienen capacidad suficiente. "Quiero indicarle, para que lo sepan los ciudadanos de Canarias, que sólo las comunidades autónomas gobernadas por el PSOE y las diputaciones forales del País Vasco han puesto de momento plazas a disposición para el traslado de menores, salvo Murcia, que ha indicado que pondrá 10 plazas, pero todavía no sabemos el plazo concreto", explicó el ministro al parlamentario canario. "Por tanto, está en marcha el programa, el interés de los menores es lo prioritario y, por supuesto, cumpliremos íntegramente los compromisos que hemos asumido con la comunidad autónoma de Canarias", añadió.

"Un problema de todos"

Rivero contestó: "Este no es un problema de Canarias. Es un problema de todos, es un problema de Estado y hay que verlo como un tema de Estado y, por tanto, en el que todos nos sintamos comprometidos para darle respuesta. Si el Estado globalmente no es capaz de mostrarse solidario en dar respuesta a este grave problema, difícilmente España puede encontrar la solidaridad que estamos reclamando en estos momentos en Europa para acoger a menores no acompañados. Canarias está asumiendo una cuota que está muy por encima de sus posibilidades. Canarias representa el 4% de la población total del Estado y está asumiendo que se queda con 300 menores, que es una cifra muy razonable".

Caldera admitió que "Canarias por sí misma no puede tratar" el problema de la acogida de menores inmigrantes que llegan en patera a las islas y se comprometió a poner todos los medios "para que el programa salga correctamente".

"Me gustaría que todas las comunidades autónomas cooperaran. El Gobierno, y todos los españoles, nos estamos volcando con las islas Canarias y hemos incrementado en un mil por cien los medios y las ayudas económicas para atender este grave fenómeno", concluyó el ministro.

Hoy llegarán los primeros menores a comunidades gobernadas por el PSOE.