Las lluvias, en el segundo año de sequía, se sitúan un 15% por debajo de la media histórica

Acabó el segundo año de sequía. El curso meteorológico 2005-2006 (del mes de septiembre al de agosto) se ha saldado con 567,8 litros por metro cuadrado de lluvia de media. Esto supone un aumento respecto al año anterior, el más seco desde que hay registros y en el que cayeron 491 litros por metro cuadrado. Pese al aumento, las lluvias en los últimos 12 meses han estado un 15% por debajo de la media histórica, que está en 662,2 litros por metro cuadrado. Aunque las previsiones a medio plazo no son demasiado fiables, el Instituto Nacional de Meteorología muestra "un ligero optimismo" de que en otoño se produzcan unas precipitaciones normales y que éstas palien la sequía.

Las sequías en España son periódicas y duran varios años. Aunque no todos fueron excepcionalmente secos, la última se prolongó entre 1992 y 1995 (algunos autores sitúan el inicio en 1990). Esto significa que la actual sequía, que comenzó con el año más seco desde que hay registros, puede proseguir; pero también que puede haber pasado lo peor.

Entre septiembre de 2005 y agosto de 2006 se prolongó la falta de lluvias. Sólo octubre, noviembre y marzo registraron precipitaciones superiores a la medida desde 1930. En total, las lluvias fueron un 15% inferiores a las de la media, según el Instituto Nacional de Meteorología, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, pero cuyos datos difieren de los que aporta el ministerio cada semana en el boletín hidrológico. El año anterior, las lluvias fueron un 21% inferiores a la media.

Las zonas más castigadas por la sequía este año son la cabecera del Tajo, el norte de Extremadura y Madrid y algunas zonas de Sevilla. Allí la precipitación recogida ha sido entre el 25% y el 50% de lo que es normal. Que la zona más castigada sea la cabecera del Tajo explica que los embalses del trasvase no mejoren y hayan perdido 120 hectómetros cúbicos de agua en un año. Tan sólo La Rioja, Navarra, Aragón y parte de Castilla y León han registrado más precipitaciones de lo que es normal.

Pese a todo, las primeras borrascas comienzan a llegar a la Península. El jefe de Previsión del Instituto Nacional de Meteorología, Ángel Rivera, prevé lluvias para los próximos días. Y añade: "Las previsiones a tres meses que manejamos no son muy fiables. Se hacen viendo si los parámetros que condicionan el clima están anormales o no. Para España no lo están así que eso nos hace prever lluvias normales. Por eso tengo un ligero optimismo" en que las lluvias puedan mitigar los efectos de la sequía.

La sequía puede acabar de golpe, como ocurrió en noviembre de 1995. Entonces, el inicio de unos años húmedos, que dejaron lluvias de más de 700 litros por metro cuadrado, propiciaron que los embalses se llenaran rápidamente.