Un pueblo de Almería recalifica suelo suficiente para triplicar su población

El Ayuntamiento del municipio almeriense de María (1.565 habitantes) aprobó el pasado mes de mayo la propuesta de un convenio urbanístico de planeamiento en algo más de 65 hectáreas ubicadas en el paraje de Balsain para construir 850 viviendas. El proyecto, que ya ha recibido alegaciones por parte de un particular y de una comunidad de regantes de Vélez Blanco, contó con el voto favorable de los cuatro ediles del PA y uno del PP. Los cuatro concejales socialistas se abstuvieron. La urbanización podría ocupar el doble de la superficie actual del pueblo, con capacidad para 3.000 habitantes.

Los terrenos recalificados se encuentran junto al Parque Natural de Sierra de María-Los Vélez y algunas de las hectáreas rayan el límite con éste. La alcaldesa, Juana Serrano López, del PA, asegura que el proyecto es sólo un avance del PGOU y que aún faltan pasos administrativos para que pueda culminarse. "Es el único convenio que hay y la única propuesta y está dentro del crecimiento que María puede soportar perfectamente. No entiendo por qué tanto cebarse con eso cuando hay municipios en la provincia que contemplan hasta 8 y 10 campos de golf. Aquí ni siquiera hay campo de golf, es una urbanización para utilizarse como polígono residencial. No soy partidaria ni voy a aceptar ningún macrocrecimiento. Las viviendas no son adosadas, cuentan con pequeñas parcelas y el impacto visual no es desagradable", defiende la alcaldesa.

El compromiso de la promotora murciana Cantero y Gomariz S. L. -única beneficiaria del convenio urbanístico en Balsain- incluye "colaborar" en la mejora y ampliación de las infraestructuras y equipamientos del municipio con 390.000 euros una vez hecha la clasificación como suelo urbanizable.

Dicha cantidad se desglosa en 60.000 euros tras la firma del convenio, 150.000 tras la aprobación inicial del PGOU, 80.000 tras la aprobación del plan parcial que desarrolla el ámbito de actuación y 100.000 tras la aprobación definitiva del plan parcial.

El Ayuntamiento obtendría, además, el aprovechamiento lucrativo estipulado en el convenio equivalente al 10% del terreno. De ese 10% el Consistorio se quedaría con 3.000 metros cuadrados para la construcción de una residencia de menores y el resto lo vendería al promotor a un precio de 90 euros el metro cuadrado. "Nosotros hemos calculado que nos aportaría cerca de un millón de euros, aparte de lo que generen por su naturaleza las licencias de obras y demás", apunta Serrano.

Las dos únicas alegaciones presentadas contra este proyecto corresponden a la de la comunidad de regantes de aguas del Maimón de Vélez Blanco, reconocida por la Confederación Hidrográfica del Segura, y a un particular vecino de Vélez Rubio. Los regantes han pedido la anulación del convenio urbanístico al entender que la futura urbanización necesitará abastecerse de agua potable del acuífero del que se nutren históricamente. "Esta comunidad de regantes, en defensa de sus intereses preexistentes reconocidos, se opone a cualquier actuación que provoque la disminución de caudales de nuestros manantiales, considerando que la construcción de 850 viviendas y la población que viva en esta urbanización necesitará un enorme caudal que irá en detrimento de nuestras fuentes", explica Dionisio Gázquez Aliaga, presidente de Aguas del Maimón.

Por su parte, el vecino de Vélez Rubio denuncia que de llevarse a cabo el proyecto, "se abriría la veda para que promotores inmobiliarios, constructores y toda clase de especuladores de adentro y fuera de la comarca, con el beneplácito de algunas corporaciones, se aprestaran a bordear el Parque Natural de numerosas urbanizaciones para pudientes en primera línea de monte", explica.