La desgracia de Gasol

Pau Gasol tenía una idea entre ceja y ceja: ganar el Mundial. Su ambición se corresponde con su inmensa categoría como jugador. No es el único, pero es uno de los que marcan la línea en la selección. Su liderazgo es una cuestión intrínseca. No le gusta alardear ni ser estridente, pero es la referencia principal para todos sus compañeros. Por eso, cuando faltando un minuto y 36 segundos para el final, se torció el pie izquierdo, sonaron todas las alarmas. La acción se produjo bajo el aro argentino, cuando trataba de remontar la línea de fondo y Oberto le hizo falta. Gasol trató de evitar el cuerpo del pívot argentino, pero su pie de apoyo le falló. De inmediato, se retorció de dolor. Aun así, lanzó y anotó dos tiros libres vitales porque pusieron el 73-70 en el marcador. Pero, acto seguido, con el pie hinchado, tuvo que ser relevado.

"La baja de Pau puede ser un acicate. Hemos ganado partidos sin él", dice el técnico español

Se desconoce todavía el alcance de su lesión en ese pie izquierdo. Hoy será sometido a unas pruebas médicas en un hospital de Tokio o de Saitama. Las perspectivas no son halagüeñas. Es muy difícil que pueda disputar la final. Su contratiempo es de tal calibre que incluso empañó las celebraciones por el histórico triunfo obtenido sobre Argentina. "No nos ha dado tiempo a expresar la alegría", explicó Pepu Hernández, el seleccionador. "La lesión de Pau me preocupa porque esas cosas afectan al equipo, sobre todo en este momento. Pero es posible que hasta nos pueda servir de acicate ante Grecia. Sabemos además que hemos ganado partidos sin su presencia. Si él no puede jugar, ya hemos empezado a hablar en el vestuario para que redoblemos nuestra unión y nuestras fuerzas", continuó; "de todas maneras, parece que no podrá estar en la final, pero igual me da una sorpresa. No quiero anticiparme, pero sí tenemos que estar preparados".

La selección terminó el año pasado cuarta en el Europeo de Belgrado, en el que Gasol no participó después de haber sufrido una lesión en un pie con su equipo, los Grizzlies de Memphis. Garbajosa elogió ayer a su compañero: "Confío todavía en que pueda jugar la final porque él se merece más que nadie disfrutar de ese momento. España necesita a Gasol, pero, si no está, no vamos a perder la confianza en que podemos derrotar a Grecia".

La importancia de Gasol en el juego español es evidente. Da una idea de su magnitud la estadística en los ocho partidos que ha disputado en el Mundial. Es el máximo anotador del equipo con 170 puntos, por delante de Navarro, con 106, y también el máximo reboteador, con 75 capturas por las 38 de Garbajosa y Carlos Jiménez. Gasol es también el tercer máximo anotador absoluto del torneo con una media de 21,3 puntos por partido, sólo superado por el chino Yao Ming, con 25,3, y el alemán Dirk Nowitzki, con 23,9. Precisamente, Nowitzki es el único que le supera en la lista de mejores reboteadores, con una media de 9,6 capturas por partido por 9,4 de él.

Rudy Fernández puso el ejemplo del partido que España ganó a Alemania en la primera fase para explicar cómo, desde su punto de vista, el equipo está capacitado para superar una ausencia tan sensible. "Fue un encuentro de muchas faltas. Pau tuvo que reservarse muchos minutos en el banquillo y, sin embargo, conseguimos ganar a un rival tan competitivo como Alemania", comentó; "Pau es un referente para el equipo, pero tenemos que intentar sobreponernos si no puede estar en la final". Calderón, que no pudo disputar la final del Mundial júnior de 1999, en la que España ganó a Estados Unidos, a causa de una lesión, explicó: "Estamos tristes por lo de Pau, pero no perdemos la esperanza de que pueda estar con nosotros porque le necesitamos".

Gasol ya sufrió una lesión en la espalda durante los encuentros de preparación para el Mundial que España saldó con un pleno de victorias.