Los incendios forestales han calcinado más de 3.300 hectáreas, el 40% menos que en 2005

El consejero de Medio Ambiente de la Generalitat, Francesc Baltasar, calificó ayer de "moderadamente positivo" el balance de la campaña contra incendios de este verano, que finalizará el próximo 15 de septiembre. De acuerdo con las cifras que maneja su departamento, entre el 1 de enero y el 20 de agosto, 550 incendios han calcinado en Cataluña 3.368 hectáreas. Durante el mismo periodo de 2005 habían ardido 4.758 hectáreas, casi el 40% más. La mayoría de los incendios se lograron extinguir en "menos de una hora" y sólo dos superaron las 100 hectáreas.

Desde el pasado 15 de junio, día en el que comenzó la campaña de verano, se han producido 295 incendios en el campo catalán, pero sólo 17 de ellos han superado las 100 hectáreas de superficie calcinada. En palabras del consejero, la inmensa mayoría de los focos se lograron extinguir "en menos de una hora".

Baltasar atribuyó la poca incidencia del fuego en el territorio catalán a la "extraordinaria eficiencia" de los bomberos y los agentes forestales y a la participación de voluntarios en las tareas de extinción. Baltasar pronunció la conferencia Naturaleza, uso o abuso en la Universitat Catalana d'Estiu, que se celebra en la localidad francesa de Prada de Conflent.

Las condiciones climatológicas de estos últimos meses auguraban malas noticias para los bosques catalanes. A la sequía y las altas temperaturas registradas durante junio y julio, se sumaron las lluvias caídas durante abril y mayo, que habían generado un aumento de la biomasa forestal. Teniendo en cuenta estos condicionantes, Baltasar no pudo ocultar su satisfacción por la poca incidencia que, hasta el momento, está teniendo el fuego sobre la superficie forestal.

El consejero explicó que la mayor parte de los incendios en Cataluña se deben a causas naturales, el 25% de ellos como consecuencia de tormentas seguidas de aparato eléctrico. Se trata de un dato sorprendente, teniendo en cuenta que en el resto de España la mano humana está detrás del 90% de los siniestros, ya sea de manera intencionada o fruto de alguna imprudencia, como lanzar una colilla de cigarro sin apagar.

Baltasar afirmó que las penas que castigan la autoría de incendios son "suficientemente fuertes", por lo que no se mostró partidario de endurecer el Código Penal.

Este verano en Cataluña se ha detenido a tres personas acusadas de causar incendios forestales. Dos de los acusados permanecen en prisión, mientras que el tercero está en libertad provisional. La ley establece penas de cárcel de entre uno y cinco años en caso de que hubiera intencionalidad, y de 10 a 20 años si el incendio pone en riesgo la vida de las personas. Las imprudencias se pagan con una condena de entre seis meses y un año de prisión.

Francesc Baltasar, de Iniciativa per Catalunya Verds, eludió pronunciarse sobre si los efectivos técnicos y humanos con los que cuenta la Generalitat serían suficientes para combatir una oleada de incendios semejante a la que se ha producido estas últimas semanas en Galicia. El consejero se limitó a responder que el 80% de aquellos siniestros fueron intencionados y añadió que Cataluña colaboró en su extinción con el envío de 130 bomberos.

Por provincias, Girona ha sido la más afectada por los incendios. El más grave afectó a los municipios gerundenses de Ventalló y Cistella (Alt Empordà). El fuego calcinó 1.100 hectáreas y, a tenor de todos los indicios, fue intencionado. El consejero de Medio Ambiente afirmó que las investigaciones siguen en curso, aunque por el momento no hay datos concluyentes sobre la autoría. El fuego obligó a desalojar a unas 400 personas de los núcleos urbanos cercanos.

Dos días después surgió otro importante foco en Capmany (Alt Empordà), que arrasó 446 hectáreas. También hubieron de ser desalojados vecinos de casas y urbanizaciones afectadas por el incendio. En este caso, el fuego fue ocasionado por una colilla mal apagada. Una portavoz del departamento admitió que el Gobierno catalán todavía no ha aprobado las ayudas económicas para los afectados.