IU ve tráfico de influencias en el caso de la zona verde de Aifos en Málaga
El alcalde insiste en la idoneidad de recalificar la finca de Gibralfaro
El coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, aseguró ayer que la recalificación como urbanizable de una zona verde en Málaga, propiedad del dueño de la promotora Aifos, sobre la que el futuro plan general urbanístico permitirá construir 22 chalets "muestra claramente que el Ayuntamiento tiene un tráfico de influencias muy importante en el desarrollo urbanístico de esa zona".
Valderas acudió ayer a Málaga dispuesto a aguar la Feria a los responsables del urbanismo municipal. El máximo dirigente regional del IU dijo que la recalificación de la finca de Aifos en el monte Gibralfaro de la capital malagueña, prevista en el avance del PGOU, "huele bastante mal" y anunció que pedirán al Consistorio "las comisiones que hagan falta para esclarecer el caso". Valderas afirmó que "si es necesario" llevarán el asunto a la Fiscalía.
El líder regional de la coalición de izquierdas basó la acusación de tráfico de influencias en que, según él, "no parece muy claro que una empresa compre un terreno verde esperando que se recalifique". Para Valderas "alguien se habría aprovechado con conocimiento de causa de una situación", ya que, de lo contrario, "no compraría en zona verde".
El dueño de Aifos, Jesús Ruiz Casado, imputado en la operación Malaya contra la corrupción en Marbella, compró en enero de 1999 la finca de Gibralfaro con intención de construir su vivienda sobre una de las dos edificaciones en ruinas que había en el terreno. Después de varias resoluciones municipales, confirmadas después en los tribunales, que obligaban a Ruiz Casado a derribar las obras de esa residencia familiar, el promotor decidió ejercer su derecho a que el Ayuntamiento le expropiara la parcela y le compensara por ello. Dentro de su área de reparto en el PGOU vigente, a la parcela le corresponden 19.300 metros de techo edificable, una cantidad que, a precios de mercado, puede resultar muy gravosa para el Ayuntamiento.
Por esta razón, el municipio optó por recalificar los terrenos y permitir en ellos una "baja edificabilidad", según el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre. El regidor insistió ayer en que la recalificación a urbanizable es la solución "más económica" para las arcas municipales. "La oficina del PGOU se plantea si tiene sentido pagar bastante dinero como compensación obligatoria para que los terrenos pasen de ser privados a públicos. La gente que se va a ver beneficiada en esa zona cabe en una pequeña lista, y tal vez sea mejor gastar esos recursos en otra zona de la ciudad", señaló De la Torre a la cadena SER.
El dueño de Aifos rechaza la solución propuesta por el Ayuntamiento. De hecho a mediados de julio presentaron un recurso en la Gerencia de Urbanismo en el que insisten en que se les compense de acuerdo con el planeamiento urbano aún en vigor.
Otro político que ayer trató de la recalificación de la parcela de Gibralfaro fue el delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en Málaga. José Luis Marcos recordó que hace cinco años la Delegación de Educación solicitó en esa zona de la ciudad una parcela para construir un colegio, "y el Ayuntamiento dijo que no era posible porque la parcela era zona verde".
El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Málaga, Juan Ramón Casero, aseguró que Marcos "se refiere a una parcela de monte Clavero, que no tiene nada que ver con el monte Gibralfaro" y sugirió al delegado de la Junta que "lo primero que debe hacer es conocer la ciudad", ya que "hay una importante distancia de una a otra parcela" a pesar de que ambas están en la zona este de la ciudad.
Por otro lado, el decano del Colegio de Arquitectos de Málaga recordó a De la Torre la importancia "de contar con espacios libres en la ciudad".
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