López Obrador dice que impedirá que Calderón sea presidente de México

La polarización de las fuerzas políticas que se disputan la presidencia de México se agudizó al entrar en su recta final el recuento parcial de votos ordenado por el Tribunal Electoral. El candidato izquierdista Andrés Manuel López Obrador advirtió ayer de que, en el caso de que los magistrados confirmen el triunfo del conservador Felipe Calderón, no permitirá que su rival sea proclamado presidente.

Calderón, del Partido Acción Nacional (PAN), está convencido de que el recuento que hoy concluye confirmará el escrutinio oficial, que le dio una ajustada victoria por 234.000 votos (0,58% del total) sobre López Obrador. Ayer, Germán Martínez, portavoz de la formación oficialista, dijo que con el 58% de las 11.839 mesas recontadas, el 75% "no ha presentado variación alguna". En ellas "el conteo fue perfecto, cero errores".

El Tribunal Electoral tiene de plazo hasta el último minuto de hoy domingo para dar a conocer su fallo sobre el recuento.

Martínez añadió que sólo en el 3% de los paquetes recontados hubo errores de más de cinco votos, en tanto que en el resto la diferencia fue de menos de cinco. Martínez descalificó la reclamación de López Obrador de que haya un recuento general de los más de 41 millones de votos. La realidad es que "perdieron la elección y están descubriendo que en el recuento [parcial] queda confirmada su derrota".

Mientras, López Obrador, candidato de la coalición Por el Bien de Todos, que encabeza el Partido de la Revolución Democrática (PRD), insistió en que fue víctima de un gran fraude. En una gira por el sureño Estado de Chiapas, el dirigente izquierdista advirtió que si la justicia otorga el triunfo electoral a Calderón, usará todos los medios a su alcance para impedir que su rival sea proclamado presidente, informa la agencia Efe. "No vamos a permitir que esto (la confirmación del triunfo de Calderón) se lleve a la práctica. Vamos a defender la democracia con todo lo que esté a nuestro alcance".

Previamente, su portavoz, Claudia Sheinbaum, aseguraba que "un 60% de las mesas" recontadas presentaban irregularidades, entre las más graves la falta de más de 60.000 papeletas y alteraciones en más de 100.000 [de un total de más de tres millones de votos del recuento]. "Pedimos que se anulen todos los votos en esas casillas; es obvio que hubo fraude electoral".

Los comicios del pasado 2 de julio fueron supervisados por observadores de la UE y la ONU, que respaldaron su limpieza. Sin ofrecer más pruebas que sus propias consideraciones, López Obrador agregó: "Resulta que ellos se dieron votos de más y a nosotros nos los quitaron. Eso está pareciendo". Y dejó abierta la posibilidad de radicalizar su movimiento de "resistencia civil".Ayer, cientos de sus seguidores cortaron varias autopistas y ocuparon casetas de peaje, mientras siguen ocupando el centro histórico y la principal avenida de la capital mexicana.