El alcalde de Altea evita pasar por el pleno dos planes de 5.700 viviendas

El alcalde de Altea, Miguel Ortiz, obvió el trámite previsto por la legislación y llevó a la Consejería de Territorio los dos proyectos que ésta le exigía para aprobar una macrourbanización sin pasar por el pleno. Los grupos de la oposición, PSPV y Bloc, pusieron ayer de relieve el oscurantismo con el que el PP está tramitando el complejo de los Puentes del Río Algar, al discutir en el pleno los asuntos que no habían trascendido. El proyecto urbanístico contempla la construcción de 5.775 viviendas, tres zonas comerciales, cuatro zonas hoteleras y un campo de golf en terreno recalificado en la huerta alteana, lo que supondrá el incremento de 15.000 habitantes.

El portavoz del PP, Jacinto Mulet, defendió las dos medidas que ayer pasaron por el pleno como un "ejemplo del urbanismo del PP respetuoso con el medio ambiente, frente a los privilegios de anteriores etapas socialistas". El primer punto hacía referencia a la desclasificación de 4.622.642 metros cuadrados de titularidad municipal, ubicados en Serra Bèrnia, que pasaban de ser terreno urbano a convertirse en protegido. Territorio condicionó los cambios de usos de los 3 millones de metros cuadrados de esta urbanización que impulsa el Grupo Ballester a una disminución del suelo urbanizable en el municipio. Ortiz aprobó un plan que sumaba a los 4.622.642 metros cuadrados de titularidad pública una cantidad de 330.249 metros cuadrados de pequeños propietarios, sin haber alcanzado un acuerdo con ellos. La portavoz del Bloc, Paca Sevila, explicó que "los pequeños propietarios no están de acuerdo y han presentado una demanda y han impugnado el plan. Eso es lo que lleva al pleno un punto para modificar esta aberración. Las cosas se han hecho mal desde el principio".

Ayer el Gobierno llevó de nuevo al pleno la desclasificación exigida por Territorio bajo la bandera de la protección medioambiental, y abrió el periodo de exposición pública, para que los pequeños propietarios "puedan acogerse y entrar en este plan, que les reportará mayores beneficios". Mulet intentó convencer a los propietarios "que podrán edificar con parcelas de 5.000 metros cuadrados", cuando antes sólo podían hacerlo con 10.000.

Protección río Algar

El PP también llevó al pleno el Plan Especial Protección Río Algar, elaborado entre el Consistorio y Territorio al tratarse de un condicionante para poder construir junto a esta zona húmeda. La oposición volvió a denunciar que la comisión de gobierno aprobó el pasado 2 de febrero el plan, y en el mismo texto se recogía la necesidad de ser ratificado en el siguiente pleno "lo que el alcalde ha ocultado durante cinco meses", señaló Sevila. El PSPV alertó sobre la "carencia de agua" para abastecer a estos 15.000 nuevos habitantes. Según la edil Pepa Perles, la Confederación Hidrográfica del Júcar con los nuevos responsables "hubieran impedido esta aberración".