La SEPI y los sindicatos agotan el plazo para pactar la reforma de RTVE

Las negociaciones sobre la reforma en RTVE entraron ayer en su recta final. La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y los sindicatos del Ente Público celebraron una maratoniana reunión para intentar llegar a un pacto sobre la configuración de la plantilla de la nueva corporación, su estructura territorial, los niveles de producción propia, las categorías profesionales, el futuro de la Orquesta y Coro y la gestión de los fondos documentales de RTVE.

El documento entregado ayer a los representantes de los trabajadores establece que la mitad de los 8.242 trabajadores fijos del grupo estatal deberán abandonar la compañía (el excedente se sitúa en 4.150 personas). Paralelamente, RTVE prevé la creación de nuevos empleos y el rejuvenecimiento de la plantilla.

La empresa aspira a reducir progresivamente los puestos de trabajo, de modo que de los 9.366 empleados actuales (1.124 de ellos contratados), se reduzcan a 6.230 (600 contratados) dentro de dos años. Para llevar a cabo este proceso, RTVE quiere acometer un proceso de prejubilaciones que afectará a todos aquellos trabajadores que el próximo 31 de diciembre tengan 52 años o más y una antigüedad de al menos diez años. Las bajas afectarán también a aquellos que cumplan esa edad hasta el 31 de diciembre de 2008. En estos casos, percibirán el 73% del salario bruto medio del último año. Además, cobrarán los correspondientes complementos hasta la edad de jubilación (65 años).

Plan alternativo

La SEPI apuesta por reducir la plantilla a través de medidas "universales y no discriminatorias", como es el criterio de la edad. Sin embargo, fuentes de la negociación precisaron que si no se alcanza un pacto sobre el modelo propuesto, se pondría en marcha un Plan B, según el cual el recorte de empleo afectaría a determinadas categorías profesionales. Algunas de ellas llegarían a desaparecer, y los trabajadores adscritos a las mismas ("categorías no necesarias") se verían obligados a abandonar la empresa independientemente de su edad.

En caso de no alcanzar un acuerdo, el expediente de regulación de empleo se presentaría automáticamente ante el Ministerio de Trabajo. La empresa no garantizaría entonces la creación de nuevos empleos.

El documento analizado ayer con los sindicatos determina los niveles de producción propia de TVE a partir de 2007, que abarcará como mínimo 8.200 horas (900 más que en 2004). Alrededor del 23% (excluidos los telediarios) se llevarían a cabo en el centro de Sant Cugat (Barcelona). A su vez, Canarias abordaría producciones relacionadas con su condición insular y ultraperiférica.

También se garantiza la continuidad de la Orquesta y Coro, a través de una fundación en la que esté presente RTVE, así como la titularidad y gestión de los fondos documentales.