La OTAN pide a España que siga en Afganistán pese a la muerte de un soldado

El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, confirmó ayer que el ataque contra tropas españolas el pasado sábado en Afganistán, en el que un soldado murió y otros cuatro militares resultaron heridos, fue "sin duda un atentado premeditado". A las 20.45 llegó a la base de Torrejón (Madrid) el avión que transportaba a los heridos y el cuerpo del fallecido. Alonso y el presidente José Luis Rodríguez Zapatero se reunieron ayer con el secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop Scheffer, quien pidió que España "mantenga su determinación" en la misión de Afganistán.

Al funeral por el soldado paracaidista Jorge Arnaldo Hernández, de 26 años, asistirán el presidente del Gobierno y el líder del PP, Mariano Rajoy, así como el ministro de Defensa y el jefe del Estado Mayor del Ejército, el general Carlos Villar Turrau. El oficio religioso se celebrará a las 10 de la mañana en la base a la que pertenecen los heridos y el militar fallecido, la Brigada Paracaidista de Alcalá de Henares. Por deseo de la familia, el cuerpo del soldado de nacionalidad española será trasladado posteriormente a Perú, su país de origen. Los otros cuatro militares serán trasladados al hospital Gómez Ulla para tratarse de las heridas, en principio leves, que sufrieron al explotar una mina anticarro cuando realizaban una patrulla rutinaria a 63 kilómetros de Farah, en el oeste de Afganistán.

Mientras, avanza la investigación sobre las circunstancias en las que se produjo la explosión, y se confirma la hipótesis de un ataque preparado contra las tropas españolas. Lo ratificó ayer el ministro de Defensa en el transcurso de una rueda de prensa conjunta con el secretario general de la OTAN.

Alonso subrayó que "sin duda se trata de un atentado premeditado" contra las tropas españolas. Y detalló que el explosivo se encontraba enterrado, que tenía un peso de unos tres o cuatro kilos y estaba compuesto por trilita. El ministro apuntaló su teoría con algunos datos que ya ha desvelado la investigación. Por ejemplo, que el ataque se produjo cuando el convoy formado por nueve vehículos Vamtac, ocupados en total por 33 soldados españoles, regresaba a la base por un lugar de "obligado paso". Los investigadores han hallado en la zona del ataque colillas y otros restos recientes, por lo que los insurgentes pudieron colocar la mina anticarro en el tiempo que el convoy llegaba al final de su recorrido habitual y regresaba a la base. El ministro destacó que no se ha localizado ningún resto de cables.

Tanto en la entrevista con el ministro de Defensa como en la que mantuvo posteriormente con el presidente del Gobierno, el secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop, definió el papel de España en Afganistán como "muy importante" y pidió al Gobierno "mantener la determinación" en el país asiático, ya que, dijo, "las fatalidades no pueden conducir a una vacilación". España aporta unos 700 soldados a la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) en Afganistán. El ministro de Defensa ya había anunciado el día anterior que el Gobierno mantendrá el contingente pese a que Afganistán es un país "de riesgo".

De Hoop señaló que las fuerzas aliadas deben impedir que el país asiático "recaiga" en la situación anterior y se convierta en "caldo de cultivo terrorista". Para concluir a continuación: "Las consecuencias serían terribles para Europa, los talibanes no pueden hacerse ilusiones de salirse con la suya". También aprovechó para manifestar que la presencia española en Kosovo es "capital", y que la misión aliada debe mantener su presencia, a la que España contribuye con otros 700 soldados.

El PP, a través de su número dos, Ángel Acebes, ofreció su "homenaje a las víctimas" del ataque en Afganistán y su "recuerdo y solidaridad a los familiares". Acebes destacó la "trascendente y arriesgada labor que cumplen los soldados en la misión para imponer la paz donde hay una guerra terrorista". El soldado, subrayó Acebes, "ha muerto en un acto de guerra y merece un funeral de Estado con todos los honores". El PP confía en que Alonso "dé cumplida información del ataque". Si no lo hace, se lo reclamarán en la Diputación Permanente del Congreso. El portavoz socialista en el Congreso, Diego López Garrido, apuntó que la misión en Afganistán está "auspiciada, dirigida y autorizada por la ONU y es una misión de paz para consolidar la democracia, que cuenta con el respaldo del Parlamento".