_
_
_
_
Reportaje:Alemania 2006

La final de los Dassler

Adidas (Francia) y Puma (Italia) reverdecen la vieja enemistad de los hermanos Adolf y Rudolf, fundadores de ambas empresas

En la cocina de una modesta casa en Scheinfeld, un pequeño pueblo cercano a la ciudad de Herzogenaurach, empieza esta historia, la de Adolf (Adi) y Rudolf, (Rudy), los hermanos Dassler. En verdad, es la historia del diseño de material deportivo y la de una pelea familiar que, un siglo después, ha terminado por convertirse en la lucha por el control del mercado de dos colosos que el próximo domingo, en Berlín, vivirán el penúltimo capítulo de una disputa que se remonta al final de la Segunda Guerra Mundial.

Hasta entonces, 1948, los dos hermanos Dassler trabajaban codo a codo cosiendo botas desde que en 1920 empezaron a confeccionar calzado para futbolistas imitando los pesados borceguíes que llegaban de Inglaterra. Unidos, experimentaban cuanto podían a medida que vendían su producción bajo la firma Gebrüder Dassler OHG. No está claro por qué, pero en 1948, Adi y Rudy se separaron. El primero fundó Adidas; Rudolph, Puma. El domingo, en la final de la Copa del Mundo de Alemania 2006, Francia competirá con Italia. Esta vez, será también el duelo de Adidas contra Puma. Para los jugadores, el partido de su vida; para las empresas, algo más que dinero... o tal vez ya no.

Berlín vivirá el penúltimo capítulo de una disputa que se remonta a 1948
La camiseta 'azzurra' se ha convertido en uno de los productos más vendidos este verano

Cuatro millones de euros ganará como prima la selección que prepara Lippi de vencer a Francia el partido del Olímpico de Berlín el próximo domingo. Es el premio estipulado en un contrato que le reporta a la federación italiana unos ingresos de 12, 4 millones por cuatro temporadas. Italia fue la gran apuesta de Puma con vistas a este Mundial. Dispuesta a combatir a la todopoderosa Nike (Brasil, Holanda, EE UU...), y a su fraternal enemiga Adidas (Alemania, Francia, España, Trinidad y Tobago, Japón y Argentina), a Puma solo le quedaba una campeona del mundo en el Mundial por vestir y apostó por ella, como lo hizo por otras once selecciones, casi todas africanas: Costa de Marfil, Togo, Túnez, Arabia Saudí, Angola, Ghana, Paraguay, Polonia, Suiza y la República Checa. Con una venta de producto en el mercado que alcanza los 286 millones de euros, Puma ha experimentado una subida de mercado importante, debida según los expertos a la recuperación de diseños retro. La empresa alemana, que en su momento utilizó a Pelé y Maradona como imagen de sus productos, ha abierto mercado en África para seguir plantando cara a Nike, que no da cifras de su volumen de negocio, y a Adidas, que el año pasado declaró ventas por valor de 768 millones de euros y que además de calzado y vestimentas, confecciona balones desde 1963.

Si en este Mundial Nike era representada por Ronaldo, Ronaldinho y Henry, principalmente, Adidas lucía un elenco de futbolistas en nómina impresionante (Messi, Zidane, Xavi, Ballack, Zidane...) mientras Puma, que se la jugó con Samuel Eto'o como icono global lamentó que Camerún no se clasificara. Lógicamente, la zamarra azzurra se ha convertido en uno de los productos más vendidos este verano. En Italia hay localidades que ya se han quedado sin existencias.

Adidas, que sigue manteniendo su centro de investigación en el pueblo de Scheinfeld, donde nació y dónde en 1925 patentó su primer producto, presume de ser el inventor de los tacos recambiables. Gracias a ellos, dicen, se obró el milagro de Berna, en 1954, cuando Alemania ganó su primer mundial a la gran favorita, Hungría, en parte por la aparición de la lluvia. Los magiares resbalaban, mientras los alemanes seguían de pie; el invento de Adi Dassler funcionó, y su marca, la de las tres bandas, quedó unida de por vida a Alemania.

Arriba, los jugadores de Italia con camisetas de Puma. Abajo, Francia con Adidas.
Arriba, los jugadores de Italia con camisetas de Puma. Abajo, Francia con Adidas.AP / REUTERS

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_