El control que desplaza el puente del Maremágnum permanece abierto y sin vigilancia 20 minutos

Los ciudadanos que paseaban el pasado lunes por la tarde por la Rambla del Mar, el puente levadizo que une la zona de Colón de Barcelona con el Maremàgnum, observaban entre curiosos y perplejos una incidencia en uno de los extremos del puente. Una de las dos cajas de control que sirven para accionar el mecanismo de desplazamiento de la pasarela para permitir el paso de barcos permaneció abierta, con la llave puesta y sin vigilancia, durante al menos 20 minutos.

Al observar esta irregularidad, un fotógrafo de este diario que transitaba por el puente alertó de ello a uno de los operarios encargados de manejar los controles de la pasarela, que se encontraba en las proximidades. El trabajador le respondió que no hiciera fotos, le insultó con malos modos y excusó la anomalía argumentando: "Estamos en obras". A continuación cerró la caja de control.

La Autoridad Portuaria de Barcelona negó tener cualquier tipo de responsabilidad sobre el puente y remitió la cuestión a Port 2000, la empresa que gestiona el Port Vell de Barcelona.

Una portavoz de esta compañía reconoció ayer que se había cometido "una imprudencia" y afirmó desconocer la razón por la que una de las cajas de control permaneció con la llave puesta a la vista de los ciudadanos durante tanto espacio de tiempo. "Probablemente uno de nuestros trabajadores se ausentó dejando la caja de control abierta. Pero debió de ser a causa de una emergencia personal o familiar. En cualquier caso, fue un hecho casual", se excusó.

Sin embargo, el fotógrafo que advirtió la anomalía y avisó de ella aseguró que el operario que finalmente acabó cerrando la caja de mandos se encontraba muy cerca del mecanismo, en una garita situada debajo del puente, trabajando con un ordenador.

La portavoz de Port 2000 quiso restar importancia al asunto y aseguró que en ningún momento se puso en peligro la seguridad de los ciudadanos que paseaban por el puente. "Para que la pasarela se desplace es necesario accionar dos llaves, situadas a ambos extremos del puente, al mismo tiempo", explicó.

La caja de control abierta se encontraba en la parte de la pasarela más cercana al Port Vell. La portavoz indicó que "nunca" había sucedido un incidente similar y concluyó que "hechos como éste no deben volver a ocurrir".

La pasarela de la Rambla del Mar se desplaza varias veces al día para permitir la entrada y salida de embarcaciones de recreo y de pesca atracadas en los pantalanes del Club Náutico y del Club Marítimo, y en el Moll de la Fusta.