Madrazo confía en que se construyan 22.000 pisos de protección en tres años con la nueva Ley de Suelo

El consejero de Vivienda, Javier Madrazo, espera que en los próximos tres años sea factible construir en Euskadi "al menos" 22.000 casas protegidas, ya sea de alquiler, VPO o de precio tasado, gracias a la Ley de Suelo, aprobada el viernes por el Parlamento vasco. En una comparecencia pública en Bilbao, señaló que la ley incorpora la legislación sobre vivienda "más progresista y más municipalista" de las existentes en España y aseguró que sus frutos comenzarán percibirse a partir de septiembre, con su entrada en vigor.

Según Madrazo, en 2007 se construirán 6.600 pisos protegidos en cualquiera de las tres modalidades. Al año siguiente la cifra subirá a 7.200 y en 2009, a 8.000 viviendas, lo que daría la previsión "moderada" de 22.000 de protección para lo que queda de legislatura. El consejero contrapuso esta actividad a la de 2001, cuando se hizo cargo del departamento, cuando se construían 2.500 VPO anuales, cifra que se elevado a 5.000 en el período 2002-2005.

A estas previsiones añadió el consejero la movilización de viviendas vacías a través del programa Bizigune, para afirmar que para 2009 se resolverá el problema de la vivienda para la mitad de las personas inscritas en la lista pública Extebide. En ella figuran actualmente 60.000 demandantes, pero el consejero precisó que bastantes de los inscritos forman pareja.

Madrazo se mostró confiado en que los ayuntamientos se "impliquen" en la construcción de pisos protegidos, lo que ayudaría a conseguir "mejores resultados". Por otro lado, señaló no estar preocupado por la posibilidad de que el PP recurra la Ley d Suelo ante el Tribunal Constitucional, por supuesta intromisión en las competencias de las diputaciones, al no prosperar su impugnación ante la Comisión Arbitral. "Es una ley muy sólida. No tenemos ningún temor", manifestó.

Se felicitó el consejero por el "alto nivel de consenso político e institucional" obtenido por esta normativa, lo que demuestra que, "cuando hay voluntad de pactar", se pueden alcanzar grandes proyectos. A su juicio, este precedente "abre la puerta a lograr importantes acuerdos en materia social, política y de normalización y pacificación".