Académica entre hombres

Es posible que en Iberdrola muchos se pregunten quién es Inés Macho Stadler, la primera mujer que accede al Consejo de Administración de la eléctrica vasca. La respuesta la da la propia Inés: "Una académica". La llamada de Iberdrola le pilló por sorpresa y acudió a la cita en Madrid sin saber qué querían de ella. Aceptó con una única condición, no dejar la universidad, la investigación, su vida. De Macho Stadler, una de sus profesoras de la Universidad del País Vasco, dice que es "más lista que el hambre", apelativo que se atreve a trasladar a sus hermanos. Las tres chicas trabajan en la universidad y el chico es ingeniero precisamente en Iberinco, filial de Iberdrola.

Macho Stadler nació en Bilbao en 1959, donde dio sus primeros pasos en el mundo académico y de la universidad. Allí también encontró a su pareja en el sentido más amplio del término, David Pérez Castrillo, un licenciado en Ciencias Exactas y doctor en Economía con el que ha formado un doble tándem, en la vida y en la universidad. Ambos trabajan juntos en la Universitat Autònoma de Barcelona, cuentan con un gran prestigio en el mundo académico internacional y han tenido escaso contacto con la empresa.

El mundo eléctrico es nuevo para Macho Stadler, cuya actividad académica se centra en la teoría de los juegos. Pese a su largo currículo y tras la sorpresa inicial, se ha puesto a estudiar, algo que no le cuesta, ya que "devora libros de toda clase", en palabras de Pérez Castrillo quien señala: "Tiene ganas. Es un reto interesante y divertido en un mundo diferente".

Llega como consejera independiente, y está convencida de que lo es y que como tal puede aportar "una visión complementaria a la de otros consejeros" gracias a la distancia que les separa del día a día. Ni es inversora ni tiene contactos. Macho Stadler llega a un mundo tradicionalmente de hombres. Los que la conocen bien aseguran que no será un problema porque tiene una larga experiencia profesional. Ha tenido mucho que pelar dentro del mundo académico.

A Macho Stadler le gustan el cine y los libros, pero sobre todo le gusta investigar. El tándem académico con Pérez Castrillo le ha servido para satisfacer esta inquietud. Su trabajo además le da la libertad suficiente para otra pasión, viajar y residir largos periodos en otras ciudades. Así, ha pasado temporadas en Francia, Canadá, Estados Unidos o Dinamarca. Aunque su base de operaciones está en Barcelona, la familia le lleva de vuelta una y otra vez a Bilbao.