Losantos, Queipo de Llano y Pérez Madrigal

¿Quieren acabar con ETA? Lo dudo. Quieren acabar con Zapatero. Y tal como están las cosas se diría que, también, con Rajoy. El líder del PP no les sirve. Quieren al frente de la derecha española un líder iracundo, frenético, con arrestos, y que se ponga al frente de una gran manifestación, convocada por el PP, en defensa de España. Porque "España se ha roto. Ya no existe ni como Estado ni como nación, ni como nada". Y se la ha cargado el presidente Zapatero. A España y a la Constitución. No les sirve que el líder del PP se conforme con respaldar las manifestaciones convocadas por terceros. Por ejemplo, las que convoca la Asociación de Víctimas del Terrorismo. Ni que recurra al Tribunal Constitucional. Se lo reprochaba a Rajoy, en entrevista celebrada en la COPE, Jiménez Losantos, que se ha erigido en el salvador de España frente al ataque de rojos y separatistas. Este Federiquín se está convirtiendo en una mezcla de Queipo de Llano y Joaquín Pérez Madrigal. El primero, aquel general que desde Radio Sevilla arengaba a la ciudadanía a enfrentarse al comunismo y la masonería, durante la guerra del 36. Aún llegué a escucharle en la radio galena de mi abuelo materno. ¡Qué arengas, Dios mío! El segundo, Pérez Madrigal, el director del semanario ¿Qué pasa?, desde el que animaba a la extrema derecha durante el franquismo. En el diario Madrid tuvimos que sufrir sus andanadas. Pérez Madrigal fue diputado radical socialista durante la República -conocido como el "jabalí de las Cortes"- y acabó admirando a José Antonio y de adalid de los tradicionalistas. En esto de pasar del radicalismo de izquierda al radicalismo de derecha, su biografía coincide con la de Losantos. Quien muy bien podría heredar el apodo y pasar a ser el "jabalí de las ondas". La verdad es que tanto Queipo como Madrigal serían ahora dos buenos contertulios del director de La Mañana, en la emisora episcopal.

El caso es que a este jabalí, el líder del PP, don Mariano Rajoy, le parece un "manso cordero". Y ante el peligro que corre España hace falta más bravura. Más convocatorias del PP llamando a la ciudadanía a salir a la calle a defender con sus gritos y pancartas a la España que se hunde, que está a punto de desaparecer si no se llega a tiempo. Según Losantos, "el presidente Zapatero está en manos de ETA". "Detrás del Estatuto de Cataluña, está ETA". Y del Estatuto de Andalucía. ¡Un desastre! ¿Y cómo acabar con ETA? Primero, acabando con Zapatero. Para lo cual, o Rajoy cambia de actitud o la derecha, el PP, tendrá que cambiar de líder. Que en todo caso ha de ser un radical, sin "complejines", alguien que una vez derrotado Zapatero, esté dispuesto a acabar con ETA sin diálogo, negociaciones ni gaitas. Por la fuerza. Una especie de Margaret Thatcher -a quien ponía como ejemplo hace unos días el "jabalí de las ondas"- que cuando se le pidió por el responsable de que unos miembros del ejército británico ametrallaran y mataran en Gibraltar a unos miembros del IRA, dio un paso al frente y dijo: "Yo soy la responsable".

Y es que Losantos vuelve por donde solía. El 18 de enero de 1984, en Diario 16, escribía esto: "Ahora mismo estamos asistiendo a uno de esos ejercicios de fariseísmo masivo. Resulta que, en privado, todo el mundo alaba al GAL, pero en periódicos y tal, lo que se dice ni una carta al director...". Eran tiempos en que la derecha aprobaba la actuación del GAL, pero sin darle publicidad. Recuerdo cuando los periodistas observábamos a algunos diputados de la derecha acercarse a saludar, con sigilo y afectuosos, al ministro Barrionuevo en los pasillos de las Cortes, si el GAL había obtenido un "éxito". Eran otros tiempos. El 23 de marzo de 1981, en el editorial de Diario16, dirigido por Pedro J. Ramírez, se podía leer cosas como estas: "¿Hasta dónde llegan los derechos humanos de las bestias?... La muerte de ETA es nuestra vida... Podrán caer cincuenta etarras en combate y las manos de España quedarán limpias de sangre humana. A los policías que disparen contra ellos se les recibirá como valientes". Ignoro si seguirán pensando lo mismo. En todo caso, lo importante es eliminar a Zapatero y que vuelva el PP al poder. ¿Para acabar con ETA? ¿Y cómo?

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