Lo mejor de cada casa

Cada cadena de televisión tiene su bandera, un programa simbólico que se mantiene en la cima de la audiencia semana tras semana. En lo que va de año, y exceptuando los telediarios y los acontecimientos especiales (partidos de fútbol, carreras de automovilismo o festivales musicales), las series de ficción de producción nacional se imponen en Antena 3 y Tele 5, mientras que Cuatro triunfa con una ficción estadounidense. En la televisión estatal, sus estandartes son el entretenimiento (TVE-1) y los documentales (La 2). La nueva cadena privada, La Sexta, obtuvo su mejor dato en mayo con un espacio de viajes, según el análisis de Corporación Multimedia elaborado a partir de datos de Sofres.

Aquí no hay quien viva es la estrella de Antena 3. Fabricada por la productora Miramón Mendi, la telecomedia inspirada en el célebre tebeo de Francisco Ibáñez 13 Rue del Percebe, arrastra en lo que va de año a más de cinco millones de espectadores. Aunque la escalera más televisiva cambia de inquilinos con facilidad (del equipo fundador han desaparecido dos de sus puntales: Loles León y María Adánez), las estrafalarias peripecias de esta comunidad de vecinos siguen enganchando a la audiencia. La serie ha saltado las fronteras y creado una versión portuguesa, Aquí nao ha quem viva, en el canal SIC.

Tele 5 tiene en Hospital Central su divisa, pese a que la parrilla está salpicada de programas de cotilleos y telerrealidad. Nacida en una época marcada por la eclosión de las series médicas (Urgencia fue su referente), se ha labrado su propia personalidad. Casi cinco millones de adeptos dan fe. Ha cumplido seis años en antena y sus creadores afirman que una de las claves es su cercanía a los problemas cotidianos. Las tensiones laborales y sentimentales de los protagonistas alimentan los guiones.

El tono cáustico y arrogante de House ha atrapado a la audiencia de Cuatro. Desde su estreno, el pasado enero, ha ido sumando adeptos sin parar. Hasta ahora, la mejor marca fue la del martes pasado, con 2.829.000 espectadores, aunque durante los 10 minutos finales captó la atención de más de cuatro millones. Cataluña y Madrid son las comunidades más fieles a la serie estadounidense, producida por la Fox, que el pasado año se alzó con un Premio Emmy.

Con una mezcla de telerrealidad y concurso musical, ¡Mira quién baila! es la seña de identidad de La Primera. Presentado por Anne Igartiburu y producido por la inagotable factoría de Gestmusic, está a medio camino entre Fama y Operación Triunfo. Da cobijo a personajes populares embarcados en aprender los secretos de los bailes de salón. Es puro entretenimiento.

Los Grandes documentales son el símbolo de La 2. La franja de sobremesa, que alberga espectaculares reportajes de naturaleza, ciencia o historia, tiene un público fiel que se aproxima al millón de personas. Gana, por poco, al concurso Saber y ganar, instalado en la cadena pública desde 1997.

La Sexta, que arrancó sus emisiones a finales de marzo, obtuvo en mayo su mejor dato (118.000 espectadores) con Planeta finito. La cadena elude comentar las audiencias. Alega que, a diferencia del resto de los canales, no está implantada en muchas zonas.