La nueva ley de Asociaciones endurece los requisitos para ser de utilidad pública

El proyecto de ley de Asociaciones, que el Gobierno aprobó ayer y enviará en breve al Parlamento, derogará la norma vigente desde 1988 y planteará una nueva regulación a las más de 15.000 entidades existentes en Euskadi.

El consejero de Justicia, Joseba Azkarraga, destacó que el texto persigue una mayor flexibilidad, pero en contrapartida aumentará las exigencias a las asociaciones que quieran ser declaradas de utilidad pública y también el control posterior sobre su funcionamiento. En este momento, 166 entidades gozan de dicha consideración en la comunidad autónoma.

Azkarraga no precisó en qué consistirá esa ampliación de exigencias y control y sólo concretó que el anteproyecto dedica a ello "cuatro o cinco artículos", en lugar del único que se refiere a ese particular en la norma actual.

El anteproyecto incorpora los preceptos orgánicos y de aplicación directa en el conjunto de España porque son competencia de la Administración central y aborda también la regulación de los aspectos que son de competencia exclusiva de Euskadi.

El titular de Justicia definió la nueva ley como "general, integral y completa", ya que abarca a todas las asociaciones, incorpora los preceptos estatales y los propios de la comunidad y se refiere a todas las cuestiones relacionadas con la creación, el funcionamiento, la organización interna y la extinción de cualquier asociación.

La nueva normativa creará un protectorado de asociaciones de utilidad públicas, a las que prestará asesoramiento, apoyo técnico y seguimiento. También quedarán eliminadas las tasas que en la actualidad cobra la Administración por las actuaciones del Registro General de Asociaciones del País Vasco. Ese registro contabiliza en la actualidad un total de 15.747 entidades, en su mayoría recreativas, culturales, musicales y de danza y folklore.