El alcalde de Castellón se dio licencia de derribo y obras en 20 días

El alcalde de Castellón, Alberto Fabra, se otorgó una licencia para la demolición de un edificio de su propiedad y el consiguiente permiso de obras para levantar una nueva edificación en sólo veinte días. Según varios arquitectos consultados y tal como figura en algunos expedientes municipales, el plazo medio para la concesión de este tipo de licencias de derribo y construcción de unifamiliares, oscila en torno a los cuatro meses.

Antes de que José Luis Gimeno presentara su dimisión como alcalde, Alberto Fabra ejercía de responsable de Urbanismo. El 6 de julio de 2004 la empresa a la que había encargado la obra solicitó la licencia para el derribo de una casa y la edificación de otra vivienda en el mismo emplazamiento. Tanto el proyecto de derribo como el proyecto básico y de ejecución de la nueva edificación está firmado por su esposa, Cristina Fortanet que, a su vez, es arquitecta. El día 19 del mismo mes, la comisión de Urbanismo, que el propio Fabra presidía aprobó la demolición del inmueble. Pero Alberto Fabra no solo aprobó y firmó la autorización de su propia solicitud sino que también presidió la Junta de Gobierno Local que, el 30 de julio, aprobó, definitivamente, la concesión de la licencia y la imposición de las tasas correspondientes al impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras, así como la tasa por prestación de servicios urbanísticos que días después pagó. Alberto Fabra, en su condición de primer teniente de alcalde, presidía las juntas de gobierno local (principal órgano de gobierno municipal) por delegación, cuando el alcalde excusaba su asistencia. En la misma reunión, a la que solo asiste el equipo de gobierno, se aprobó también la concesión de la licencia de construcción "para ejecutar el proyecto básico y de ejecución que acompaña, redactado por la arquitecto Doña Cristina Fortanet", tal como indica el acta de la reunión.

Demora de hasta un año

En las últimas comisiones de Urbanismo se han aprobado varias licencias de obras de características semejantes a la que el ahora alcalde está ejecutando. Una de ellas, solicitada en julio de 2005, fue otorgada la semana pasada. Cuando se trata de licencias para edificios de mayores dimensiones o afectados por algún tipo de protección, las concesiones pueden demorarse hasta más de un año.

Por otra parte, el portavoz adjunto del grupo municipal socialista, Miguel Alcalde, desveló ayer un nuevo episodio del polémico edificio del que la esposa del alcalde es arquitecto. Las obras ya fueron paralizadas por un juez después de que el ayuntamiento desatendiera esta misma solicitud formuladas por los vecinos. Ahora, según Alcalde, los vecinos han manifestado su protesta porque se está dando entrada al garaje por una vía peatonal que, además, es ocupada por decenas de personas varios días a la semana ya que es la calle donde se ubican las tradicionales "tascas". El grupo socialista ha exigido el proyecto para estudiar cómo se ha permitido este acceso.